martes, 21 de marzo de 2023

PERSPECTIVAS, la evidencia de lo evidente © [29] By Víctor Norberto Cerasale Morteo®

PERSPECTIVAS, la evidencia de lo evidente © [29] By Víctor Norberto Cerasale Morteo® “porque todo cambio nace de una destrucción” Frida Kahlo
Imagen crédito: Carmen Conde Sedemiuqse Esquimedes https://www.facebook.com/photo?fbid=10226206238694134&set=a.3763479457252 La vida resulta ser extraña… uno anda por la vida descubriendo a los otros, los demás, esos que dicen ser amigos, pero no lo son… esos que dicen amarte, pero que no te aman… esos que hablan sobre lo que nunca harán… esos que dicen quererte, pero te usan, y te arrojan por la ventana, o te arrojan por el balcón, o simplemente te tiran a la basura, sacándote de encima, porque tu sola presencia les molesta, les incomoda, les aburre… esos que recitan bondades que no ejercen… esos que hablan de dar pero retraen la mano… también esos que dicen ser solidarios, mientras alguien los mira… esos que dicen ser buenos, para que otros los aplaudan… esos que dicen construir, lo que jamás harían… esos que hablan de voluntad, mientras huyen de cualquier responsabilidad… esos que se refieren al esfuerzo propio, cuando se sabe que jamás movieron un dedo… esos que hablan de fidelidad, mientras dan vuelta sus caras y dicen no conocerte… esos que se quitan el anillo para que nadie les descubra sus otros compromisos… esos que sonríen cuando, en verdad, por dentro te están puteando… esos que te palmean la espalda mientras te apuñalan en el cuello… esos que te abrazan mientras, al mismo tiempo, te escupen… esos que estrechan la mano dada de frente, pero se olvidan lo que te mintieron, cambiándote la historia, porque ya no recuerdan a quien le dijeron lo que le dijeron… esos que aseveran ser lo que nunca fueron, ni nunca serán… esos que te cuentan una historia que le robaron a algún otro, utilizando la seguridad del oportunismo, y el olvido de los demás… esos que te asaltan tu huerto para llevarse tus frutos, aduciendo que los mismos les pertenecen por motivos que inventan al pasar… esos que no son lo que dicen ser, pero insisten en fabricar campos minados para que seas tú el que muera… esos que dibujan la Luna, mientras despojan el futuro ajeno… esos que hablan de poesía, mientras por detrás estafan a los otros creándoles versos falsos… En definitiva, la vida resulta ser muy extraña… muchos son los que van… pocos son los que se quedan, a pesar de todo… a pesar de las circunstancias… muchos son los que crean excusas para echarte, para desplazarte, para sacarte de sus vidas, mediante artilugios, mediante excusas, mediante argumentos vacíos… muchos son los que se van porque ya no tienen nada más para exprimir, para obtener, para saquear… muchos son los que se burlan del futuro, robando los pasados… muchos son los que atropellan las circunstancias para sacar algún rédito… Uno va descubriendo personas que están vacías, cuando aseguraban estar llenas… los hechos las van desvelando… los hechos, sus hechos, las van revelando… las van poniendo en evidencia… y la evidencia se torna irrefutable… están vacías, porque antes, también estaban vacías… alguna vez se les cae la máscara, y por un instante, se les ve el rostro tal cual son… no pueden impedirlo, sencillamente porque la máscara se les cayó y su cara era otra, bien distinta a la que mostraban… ese es el problema de usar diferentes caretas con diferentes personas, después no se acuerdan cual usaban con cual… y sin quererlo, por un instante, quedan al descubierto de ellos mismos, lo que permite a los demás, darse cuenta… darse cuenta es descubrir el vacío que siempre estuvo, pero que, por alguna razón cósmica, no se veía… Uno va descubriendo personas que están desbordadas de huecos, huecos que ocultaban mediante disfraces… igual que con las máscaras, de tanto usar disfraces, de pronto no se acuerdan a quien le mostraron uno, y a quien le enseñaron otro, qué usaron antes con uno, que repiten al disfrazarse para otros… la confusión los descubre… la confusión los pone en evidencia, y esa misma evidencia los deja al descubierto… pero ni aun así se avergüenzan, insisten con el disfraz, insisten con el engaño, aunque hayan quedado en evidencia, el relato recrea una nueva historia, porque siempre aparecen nuevos creyentes… están tan acostumbrados a mentir que esa misma mentira forma parte de ellos mismos… el relato se repite, aumentando la apuesta… y siempre, alguna ventaja sacan… lo suficiente como para ir por más, sintiéndose seguros que siempre habrá un beneficio salvador de su falta de escrúpulos… el engaño resulta ser parte de su esencia, por lo tanto no se pueden desprender de él, y lo van modificando, ajustando, según la audiencia que se presenta… La vida resulta ser extremadamente extraña… ¿Sabes? … así como el miedo pesa, tiene un peso específico invisible… el engaño pesa tanto como la mentira… los que ejercen el engaño y la mentira, desconocen que pesen, por lo tanto repiten la conducta tantas veces como les resulte posible, cada vez que lo hacen, agregan carga a sus espíritus… recorren sus caminos asaltando las ilusiones de los desprevenidos que se acercan, que se cruzan, que los acompañan por un rato… recorren sus caminos estafando las credibilidades ajenas… muchas veces, diseñando caminos justo donde hay abismos… muchas veces, inventando bifurcaciones donde hay acantilados… muchos son los que caen, y pocos, muy escasos, son los que logran descubrir los accidentes antes que estos sucedan… el miedo pesa para los victimarios, no se ve, pero pesa, realmente lo hace… del mismo modo, el miedo pesa para las víctimas, no se ve, tampoco se ve, pero pesa en el alma, la vuelve densa, realmente densa… dado que el humano no lo ve, continúa con lo que hace, como si nada se modificara… curiosamente, el engaño y la mentira alteran el karma tanto como hacen lo propio con la esencia… la cambian… cambian el color del aura… modifican el contenido del alma y le restan brillo al espíritu, siendo que también opacan la consciencia… no obstante ello, como nada de eso se ve, todo el mundo sigue de largo… pero la modificación está en el seno del uno mismo… por siempre… Hay gente que piensa su vida como un viaje en tren… Otra gente piensa su vida como el andar en un camino unidireccional… Hay gente que piensa su vida como una navegación por distintos puertos, diferentes islas, múltiples destinos… La mayoría de las personas sostiene que su vivencia en la Tierra, respirando, es una travesía donde se cursan muchas vicisitudes, algunas agradables, muchas desagradables… de todo se recoge experiencia, y esa misma experiencia deja marcas indelebles, que no se ven, pero están adentro del uno mismo… Pocos piensan su vida como una trascendencia cósmica… Pocos entienden que su vida no es más que una estación cósmica en un viaje por el espacio… Como sea que se lo quiera entender, el viaje existe… comienza cuando se es engendrado… y se extiende hasta la muerte… pero siempre, se es una existencia en tránsito… no importa si es un tren, un barco, o un camino… en todos los casos es un viaje que tiene un comienzo al que se puede hacer referencia, y un final incierto, inesperado, que siempre sorprende al viajero, en el lugar menos pensado… Si en ese viaje se descubre gente única, el alma se llena de satisfacción… porque el hallazgo valió la pena el viaje… la gente que merece la pena la vida, es un auténtico descubrimiento… es un ofrecimiento divino, tanto para uno, como para el otro… es hallar un puente que habilita a ser cruzado, lo suficiente como para fundirse en un abrazo… es descubrir una sonrisa oportuna… es reconocerse acompañado en aquella travesía… es una bendición que desciende sobre el alma y la sublima… La vida resulta ser tan extraña que, a veces, un solo momento, revela la importancia del viaje… Al irse, se siente que eso solo, fue suficiente motivo… no hace falta agregar nada más…

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