PARA QUE TE QUEDE CLARO (XI)
el dispensador dice: una vez que lo lees, debes donarlo... deberías... al menos, deberías pensar en que otro merece su lectura... porque el libro pesa per sé... deja de pesar cuando lo lees... porque deja de estar en las páginas para incorporarse a tu alma... está en el papel, pero está en el alma... entonces, si la lectura ha sido apropiada, ya no necesitas la carga... debes... deberías... ir al paso que sigue... notas... memorias... reflexiones... pensamientos... ideas... ¿qué te dejó la lectura?... si lo has leído es porque habrás encontrado en los contenidos que te agregó valor... conservar el libro podría representar portar su peso en la mochila que arrastras... otro puede necesitarlo... necesitar su lectura... encontrarse con las líneas para descubrir la misma cosa que tu descubriste o bien, otra distinta... mejor... peor... da igual... de allí el sentido de las bibliotecas, las itinerantes y las fijas...
¿sabes?... Alejandría representó un hito del pensamiento humano... por eso los ignorantes decidieron quemarla con todos sus contenidos, incluyendo en ello los humanos portadores del conocimiento... porque el pensamiento activo, para el ignorante, es peligroso... porque coloca todo en tela de juicio, todo el tiempo... algo no conveniente al poder... que representa a lo más elevado de la ignorancia... luego, el poder necesita del felpudo... de la obsecuencia... del "sí amo"... del "sí mi señor"... porque el felpudo lo engrandece en su pequeñez... entonces, quemar Alejandría representó borrar la memoria de una gran franja de la historia humana... algo que facilitaría luego, más tarde, instrumentar las mentiras bíblicas... donde Dios se muestra contra su propia creación... un disparate que no resiste análisis alguno... porque el universo guarda su propio orden y su propio equilibrio que le permiten sostener la eternidad, justamente, de cara a la "eternidad"... si no, ¿qué sentido tendría todo esto?...
¿sabes?... Honduras tuvo una biblioteca semejante, equivalente, parecida a la de Alejandría... por eso los ignorantes eclesiásticos del medievo transplantado decidieron quemarla... borrar la memoria tiene sus beneficios... porque la historia comienza de cero sin que nadie entienda qué pasó antes... sin embargo, algún día la memoria regresa en forma de pensamiento humano o no humano... pensamiento... idea... alguien descubre la mentira y se da cuenta del fiasco... de la falsedad del cuento bonito...
eso mismo está sucediendo en las Américas no colombinas... la memoria está regresando a la luz...
eso mismo está aconteciendo en los contextos continentales de Asia+África y viceversa... la memoria está tomando consciencia de que la historia que inventaron no encaja con la verdadera historia humana... con esa que fabricó la iglesia católica para dominar a los despojados para volverlos pobres, y luego someterlos...
Dios no estuvo jamás en contra del hombre... porque la creación contra sí misma representa una rápida y violenta extinción... asimismo, Dios no necesita ni de representantes ni de intérpretes... ya que mora en cada espíritu como aliento de vida... hasta que el espíritu regresa a su esencia... para sumar al paso siguiente...
no, el libro que has leído necesita de un nuevo espacio... otra mente... otro espíritu... otra alma... que proporciona consciencia a las letras consumidas... o bien... toma de las letras su consciencia y la integra como valor al paso que sigue de alguien desconocido que se llegó a las páginas para descubrir una pizca de idea renovadora...
Alejandrías se han quemado muchas... Honduras se han quemado muchas... estas son significativas por sus consecuencias históricas...
cada vez que los ignorantes se apoderan de los odios pendientes... la primera víctima suele ser una biblioteca, como representación de la memoria de los otros... los rebelados... los que no se entregan... los que no se compran ni se venden por motivo alguno... los que defienden sus convicciones por sobre todas las cosas... es decir, aquellos que para el poder ignorante representan un peligro potencial, el del pensamiento libre...
tal vez sea representativo el relato del viajero que se acerca a Shangri-La... cuando aún no lo encuentra porque necesita transcurrir ciertas experiencias definitivas antes de... el frío lo acosa en la alta montaña... como último recurso decide quemar los libros que lo guiaron hasta la ciudad perdida... sucede... no puedes ingresar a Shangri La con la mochila cargada de pasados... porque en la ciudad santa sólo hay un presente que fluye incesante... las gentes de allí no envejecen porque carecen de pasado y están imposibilitados de futuro alguno... el presente es un instante matemáticamente proyectado hacia la luz de la cual proviene... creando una geometría de Moebius donde nada comienza porque nada concluye...
curiosamente, no tuve frío cuando llegué al Stupa del Itey... y tampoco lo padecí cuando salí... allí caí en la cuenta que nada me pertenecía... que nada me había pertenecido... que nada me debía pertenecer... y que todos aquellos que se habían erigido como mis dueños, jamás habían tenido consciencia de que nada les pertenece aún cuando te la creas...
sí, perteneces al suelo que pisas, pero apenas por un rato...
¿sabes?, el espíritu no necesita del cuerpo...
¿sabes?, el alma no necesita del cuerpo...
¿sabes?, la consciencia no necesita del cuerpo...
pero, ¿sabes?... ser parte de la eternidad... te hace eterno... MARZO 09, 2019.-
sólo para que te quede claro...
Carmen Conde Sedemiuqse Esquimedes
mis libros me fueron robados... los que pude, los he donado... aquellos que me robaron mi biblioteca, jamás leyeron mis libros, sólo necesitaban enseñar a los otros que los poseían... pobres almas!... almas pobres...
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