La sala Bataclan de París reabre con un concierto de Sting el 12 de noviembre
La recaudación irá a parar a dos ONG que atienden a las 480 víctimas de los atentados
París
Sting, el 20 de junio de 2015, durante una actuación en Nimes (Francia) SYLVAIN THOMAS AFP
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La sala de conciertos parisina Bataclan, en la que 89 personas fueron asesinadas el 13 de noviembre del año pasado en el ataque yihadista a París, reabrirá el próximo día 12 con un concierto de Sting, según ha anunciado hoy el propio cantante. La venta de las entradas comenzará el martes y los beneficios, según precisó en su página web, irán dirigidos a las ONG Life for Paris y 13 Novembre: Fraternité Verité, ambas dedicadas a la ayuda de las víctimas de esos atentados (130 muertos y 350 heridos).
Sting ha explicado cuáles son las dos misiones que quiere cumplir con su concierto: "Tenemos dos tareas importantes que reconciliar: primero, recordar y honrar a aquellos que perdieron la vida en el ataque hace un año, y segundo para celebrar la vida y la música que representa este teatro histórico. Al hacerlo esperamos respetar tanto la memoria como el espíritu de afirmación de la vida de los que caen, no los olvidaremos ".
Exclusive concert in Paris for re-opening of @le_bataclan just announced for Sat., Nov. 12. Details/ticket info at sting.com.
"Para nosotros es muy importante y nos ayudará a continuar nuestras acciones", indicó hoy en la cadena BFM TV la presidenta de esa primera ONG, Caroline Langlade. La emisora añadió que el día 13, en el que se cumplirá un año de los ataques, habrá allí también una ceremonia de homenaje en la que participarán los Eagles of Death Metal, la banda estadounidense que tocó esa trágica noche.
La seguridad, según añadió la cadena, ha sido reforzada para la ocasión, con un nuevo sistema de apertura de puertas y agentes de la Prefectura de Policía movilizados especialmente para esa noche.
El ataque en el Bataclan fue el más mortífero del 13-N, noche en la que también se atentó contra el Estadio de Francia y contra varios bares de París, con una cifra final de 130 muertos y más de 350 heridos. El mayor de los retos de la salaserá, precisamente, dejar de estar vinculada a los más funestos recuerdos de esta ciudad que se ha esforzado en pasar página, aunque sin conseguirlo del todo.
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