Queridas lectoras, queridos lectores

https://preview.mailerlite.com/o4u1s8e5o1/1918824398450596152/k9h1/ Jakob Johann von Uexküll (1864-1944), biólogo y uno de los padres de la ecología, propuso una nueva forma de mirar y comprender nuestro entorno: si la ciencia postulaba entonces un mundo único que comprendía las especies animales de manera jerárquica, él intuyó una variedad infinita de mundos o microcosmos, los umwelten, conectados entre sí y al mismo tiempo incomunicados, en el centro de los cuales habitaba cada organismo. Con este concepto, Uexküll propuso el abandono de la concepción antropocéntrica del mundo e intentó acercarnos a «mundos incognoscibles». En Lo que no vemos, lo que el arte ve, la crítica de arte Graciela Speranza analiza la función y el potencial del arte para hacer visible aquello que no se ve, agudizar nuestra percepción y hacernos reflexionar sobre el mundo que nos rodea y las amenazas que se ciernen sobre él. La teórica argentina recoge el concepto de umwelt en su libro y lo analiza en las diferentes manifestaciones artísticas que lo han trabajado, como es el caso de la obra de Pierre Huyghe. Artista fiel a ese abandono de la perspectiva antropocéntrica, en 2011 Huyghe hizo convivir en una galería berlinesa a una colonia de diez mil hormigas y a cincuenta arañas, libradas a sus respectivos umwelten: mientras que las hormigas marchaban en fila hacia su nido o se dispersaban en grupos por el suelo o las paredes de la galería, las arañas se confinaban solas en rincones del techo, indiferentes unas a otras, a la voluntad del artista y a la mirada de los visitantes.