jueves, 18 de agosto de 2016

CAMINO DE REGRESO

el dispensador dice: me preguntas hacia dónde estoy yendo... en realidad a ninguna parte, estoy de regreso, siguiendo un camino que me haga sentir en comunión con el mundo... no sólo el humano... no, con la Tierra y todos sus contenidos, esencialmente minerales, vegetales, y animales (mal dicho, porque animales somos todos)... sí, escribo todo el tiempo... no sólo para compartirlo contigo, sino para encontrarme a mí mismo... aclarándote que desde hace muchos años, muchas décadas, me he abrazado para no perderme nunca más... porque eso es lo que me ha permitido aceptar la vida tal cual se me fue presentando... haciéndome tomar consciencia que cuando para un tercero (otro, prójimo) eres una opción, una alternativa, una oportunidad, un bote salvavidas, entonces no tienes otra significancia que aquella que da la "ventaja"... siendo bueno pasas a cumplir el rol del "boludo de la película", o del inocente que provee soluciones que encajan en los cinismos de esos aprovechadores que luego te escupirán en la cara, y te darán la espalda como si jamás hubieses existido... ¿que si la tengo clara?, más que clara... tan clara que he leído el libro de los muertos de los egipcios en al menos veinte versiones (idiomas, traducciones, interpretaciones, etc.) hasta aprendérmelo casi de memoria, haciendo lo propio con el pésimamente llamado libro de los muertos de los Tibetanos y sus lamentables traducciones occidentales, y haciendo lo propio con el Popol Vuh, y el Libro de los libros del Chilam Balam, y tantos otros, que me fueron robados y que fui recuperando gracias a las "gracias" de los ángeles mensajeros... debo agregarte, a efectos que no queden dudas, que los Manuscritos del Mar Muerto los he leído unas sesenta veces en distintos idiomas, porque allí reside la evidencia perfecta, aquella indica que la Biblia no es una sagrada escritura sino una vil mentira urdida por la Iglesia Católica durante la edad media oscurantista e inquisidora... por consiguiente, no estoy yendo a ninguna parte... estoy de regreso de mi propia vida, feliz de estar acompañado por mi consciencia y por mi ángel de la guarda, y además por esa otra alma pura que contiene paz y que me encaja en mi propio engranaje... 

 engranaje... dije bien... engranaje cósmico de conjunciones y cuadraturas zodiacales que favorecen la sintonía de las almas que se encuentran para ser uno respirando las gracias concedidas y las otras rechazadas, porque de eso se trata todo esto, permanecer despejando ecuaciones donde nunca ganas y nunca pierdes, pero que sí estás obligado a resolver porque para eso naces, para eso vienes, para eso te conceden un destino, te dan aliento para transitar un tiempo, donde vas en búsqueda de aquello que crees de tí mismo y de los que vas encontrando a lo largo de tu senda, a veces dando, a veces recibiendo, pidiéndole a tu ángel que te interceda ante Dios para concederte las simplezas de la sencillez que propone cada circunstancia, intentando evitar que lo simple se torne complejo y que lo complejo se vuelva imposible... esto es que debemos resolver ecuaciones donde las matemáticas flotan sobre la numerología de cada quién, tornándose simples álgebras hasta logaritmos cuánticos donde la filosofía domina la lógica de los pasados fluyendo hacia los futuros necesarios... claro está... sólo el mundo caminado a pie descalzo te habilita a comprender el valor esencial de cada momento... y entonces comprendes que la vida es una sucesión de encuentros y desencuentros... donde están los que se aprovechan de tu nobleza, o te usan la inocencia, o te toman por desprevenido cuando estás descubriendo las ausencias... o siembran en tu espalda la culpa (de ellos) y la tristeza (de la envidia no resuelta)... como sea, cada oportunidad sirve para establecer ése "quién es quién" en cada circunstancia...

"quién es quién"... quién es quién en la ida... quién es quién en la vuelta... quién es quién en la presencia y quién es quién en la ausencia... ya que puedes estar presente y ausente de manera simultánea... dependiendo de ello de la calidad de alma, de la condición de persona, de la sapiencia, de la paz, de la paciencia, y de otras lógicas que hacen a la filosofía matemática de los espacios y sus consecuencias... a veces no reparamos en los contenidos de las palabras y los mensajes que subyacen a lo que se pronuncia... una especie de preanuncio de lo que serán conductas inesperadas, atropellos, mentiras, traiciones... que cuando no emanan de una necesidad circunstancial, conllevan un poder de daño que puede alcanzar lo sobrenatural, porque te toman por sorpresa y te golpean a modo de tsunami, con una fuerza brutal que se hace insoportable... por lo que significan para la consciencia y sus rituales... pero esto es un simple comentario, no lo tomes como queja, desde pequeño aprendí a buscar en el "mí mismo", los significados de la voluntad que te llevan hacia el "sí mismo", resguardándote de todas las segundas intenciones que otros emplean para devorarte cuando andas distraído en "vos mismo"... me preguntas si soy feliz... y cuando estoy conmigo mismo y mis cuitas, sí lo soy, porque busco las armonías del espacio-tiempo así como los equilibrios de la luz en cada momento... si allí en paz, estoy en paz... si en las almas contiguas no hay paz, debo acrecentar la propia para contrarrestar las fuerzas de iniquidad que pretenden invadirte para llevarte a sus abismos... sí, se trata de espíritus huecos, que chupan la savia de los otros para mostrarse brillosos, pero cuando les quitas la fuente, inmediatamente se opacan hasta secarse... porque así como carecen de esencia, también lo hacen de substancia...

porque así como carecen de esencia, también lo hacen de substancia... te lo repito para que se te  haga piel...  están vacíos de sus vidas porque se niegan a sí mismos, y también niegan la voz de sus consciencias así como la presencia de sus respectivos ángeles de la guarda... traducido: en esta vida, cuando no estás presente... careces del derecho al reclamo... y en esta misma vida, cuando no formas parte de la solución, sólo eres parte del problema... entonces no sumas, sino que restas... entonces no multiplicas (los panes), sino que divides las conveniencias de estar ausente justo cuando era prudente la presencia... dicho de otra forma, naces de una idea de ti mismo, luego eliges la matriz en la que caerás a ser vos mismo... pero desde que tomas entidad aspirante a la vida, ya estás en posesión de tu consciencia, viajando hacia tu tiempo, un tiempo que es distinto según el momento en que la convergencia se torna confluencia y que las geometrías crean un espacio en el que deberás encajar para ser, justamente, "vos mismo"... único... 

sí, vengo viajando sin tiempo pero con espacio... estoy acostumbrado al silencio sin el pasado porque la memoria de mi karma está intacta... así como estoy acostumbrado a la soledad de la compañía eterna de la propia consciencia, esa que no guarda tiempo y que es fuente ante cualquier inclemencia... ¿qué si hablo con ella?, desde luego... nos pertenecemos tanto en ausencia como en presencia, porque venimos juntos desde que somos existencia... no existencia respirable... existencia que sintoniza con lo eterno... pasajero que cumple el rol de mensajero o mensajero que regresa a su rol de pasajero... alma que no ocupa lugar pero que sí ha alcanzado su lugar... 

un lugar que no se cede... porque de eso se trata la luz... cuando perteneces a ella declinas pertenecer a nada más... 
soy mi propio árbol...
soy mi propia piedra...
soy espíritu del elefante que busca su humedal...
soy espíritu de regreso a la eternidad...
te escribo, causalmente, para que me puedas olvidar... porque al hacerlo, será allí donde nos podremos encontrar. AGOSTO 18, 2016.-

dedicado a mi "cristal" de roca.


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