Thuk Je Che Tibet - Inicio
La historia de los cuatro amigos armoniosos
"Al comienzo, solo estaba el faisán, y el árbol solo era un pequeño retoño. El faisán podía escarbar la tierra y encontrar pequeños bocados para comer. El faisán era incapaz de volar, por tanto el solo podía comer lo que encontrara cerca del suelo. Al crecer el árbol, se le hizo difícil encontrar suficiente comida.
Entonces apareció el conejo. El conejo podía comer lo que encontraba a nivel del suelo y levantaba al faisán sobre su espalda, así esta podía alcanzar las ramas del árbol que crecía. De esta forma, ambos tuvieron suficiente para comer. No obstante, como el árbol continuaba creciendo, estaba cada vez más alto para que el faisán lo alcanzara aun sobre la espalda del conejo.
Entonces el mono llego. El mono podía trepar el árbol y dejar caer los frutos al suelo para que el faisán y el conejo pudieran comer. Pero era muy difícil para el mono alcanzar las frutas que estaban en la copa del árbol.
Entonces el elefante llego. Con el elefante, todos los animales se ayudaban unos a otros, podían alcanzar los frutos de la copa del árbol; y en esta forma hubo suficiente comida para todos.
La razón para que los animales trabajaran juntos armoniosamente y que tuvieran éxito, se debía a que ninguno de ellos esta principalmente preocupado por obtener suficiente comida para ellos mismos. Cada uno se preocupaba por tratar de ayudar a los otros a obtener lo que necesitaban. Más que estar dominados por deseos egoístas, estaban preocupados por cuidar de los demás.
También, la razón de su éxito se debía a que ellos estaban dispuestos a pedir ayuda y a aceptarla. Así el faisán fue el héroe de esta historia. El faisán era la más frágil y necesitada de más ayuda. Dado que el faisán estaba dispuesta a pedir ayuda, y que los demás estaban felices en brindarla, todo funciono muy bien”.
En el Tibet, en cartas con consejos a las familias que estaban atravesando por momentos difíciles entre ellos, la historia de los cuatro amigos fue usada como un ejemplo de cómo las familias necesitan estar unidas y ayudarse unos a otros. Cada uno de sus miembros es muy diferente, y tiene diferentes fortalezas y debilidades, pero si trabajan juntos, pueden lograr metas que nunca lograrían si no lo hicieran.
Esta historia es una historia de interdependencia. Esta es una historia que explica como no existe lugar para el egoísmo, sino que más bien nos necesitamos unos a otros y necesitamos ayudarnos. La peor cosa es el egoísmo.
Esta historia es acerca de cómo trabajar armoniosamente
En nuestro entorno y en nuestras vidas, contamos con faisanes, conejos, monos y elefantes, muchas clases de personas con diferentes talentos y diferentes necesidades. Si nos enfocamos solo en los defectos de los demás, podríamos no se capaces de reconocer como ellos pueden contribuir a la mejora de nuestras vidas. Pero si somos creativos, podemos encontrar la forma para que cada uno contribuya, y al final, todos podemos obtener los frutos de la bodichita.
Y hoy mas que nunca debemos trabajar juntos para que veamos pronto un Tíbet libre, dejando atrás nuestros egoísmos, juicios y prejuicios.
Se dice que donde haya una imagen de los cuatro amigos armoniosos, las diez virtudes incrementarán, las mentes de todos se harán armoniosas y tendrán lugar muchos sucesos auspiciosos.
Thuk Je Che Tibet
Fall of Assad regime continues collapse of the Iranian dream Analysis: As
situation unfolds in Syria, Israel must significantly strengthen its
defenses on the Golan Heights border and focus on the disturbing scenario
of terrorists taking over arsenal of weapons of mass destruction Yossi
Yehoshua|Yesterday | 07:36
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https://www.ynetnews.com/article/bknd1kme1l
Hace 5 horas
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