... y aquello que alimentaba nuestros días,
en un caos de sonidos temibles que no se escuchan,
de explosiones que pasaban desapercibidas para la gran mayoría,
de energías traspasantes invisibles,
dando luz a los afanes de las almas en sus trinos,
simplemente transformó su ritmo,
vaya a saber por qué extraño artilugio,
mezcla de elementos y fuerzas...
destellos y potencias...
para enseñar a los hombres que en el universo nada queda lejos,
y aquella humanidad de conflictos y tribulaciones,
soberbia en sus determinaciones...
mucho más en sus afirmaciones,
debió aceptar que un nuevo tiempo se había instalado,
que aquello hecho ya no podría repararse,
que aquello no dicho ya no podría repetirse,
que la mano no ofrecida no podría ser brindada...
que la vida representa un halago al creador,
siempre que se dignifique la condición del don,
siempre que se reverencie la condición de la gracia,
y así como así, en ese día que nadie esperaba,
mucho menos se creía, nadie aceptaba,
mañana para unos, noche para otros,
el SOL se impuso en una nueva era
4-ESPÍRITU su signo...
y allí no hubo distinciones,
tampoco diferencias,
mucho menos discriminaciones...
el caos envolvió al todo,
para ofrecer un nuevo orden,
para que la simiente se recree a sí misma
entendiendo que sin ESPÍRITU no hay signo,
asumiendo que sin caos, no hay orden...
el dispensador: mensajes desde las Pléyades... Agosto 08, 2009.-
DEDICADO A: Silvia Viaña y sus sentidos...
No hay comentarios:
Publicar un comentario