no hay nada más vulgar que una flor de "campanilla",
sin embargo es una expresión de color, forma, y sencillez
que me atrapan desde que era niño...
por entonces, las veía crecer a la vera de las alambradas del campo,
allá en Hinojos, pero curiosamente también en
San José de Flores donde recalé después,
allí por la estación de trenes se llenaba de campanillas azules
que me nutrían el alma...
quizás, alguna vez fui campanilla,
simple en todos los sentidos...
enredándome entre alambres y trastos viejos,
mirando el Sol y reverenciando los tiempos respirables...
hoy, justo hoy, que he recibido flores desde
el mundo de las ideas de una amiga entrañable,
quiero retribuirle con esta simpleza,
estallido de color y esencias profundas,
que están siempre allí,
aunque nadie las admire,
mucho menos las aprecie...
acompañando los afanes de cada día.
el dispensador: regalando sencillez de voluntades y pensamientos. Agosto 11, 2009.-
DECICADO A: las gazañas de ALICIA... y también al espíritu de mi hermana del alma, Silvina Victoria Papis, cuyo papi viajó a la tierra del nunca jamás...
No hay comentarios:
Publicar un comentario