COINCIDENCIAS | ¿Alumbró una supernova el nacimiento de un rey de Inglaterra? - ABC.es

Ciencia
¿Alumbró una supernova el nacimiento de un rey de Inglaterra? Astrónomos aseguran que Cassiopeia apareció en el cielo como una nueva estrella el día que llegó al mundo el monarca Carlos II en 1630
j. de jorge / madrid
Día 18/04/2011 - 14.19h


NASA .Imagen de Cassiopeia A

Con toda probabilidad es una de esas casualidades cósmicas que no se rigen más que por el azar de los infinitos hilos con los que se teje el Universo, pero la aparición de una nueva estrella en el cielo el mismo día que nace un rey, resulta, por lo menos, una historia digna de leyenda en la que se mezclan la astronomía y el destino de una saga monárquica.


.Carlos II de Gran Bretaña

El remanente de supernova Cassiopeia A (Cas A) es la reliquia de la explosión de una estrella masiva que se produjo hace unos 11.000 años y una de las fuentes de radio más brillantes en el cielo. Curiosamente, aunque la luz de la explosión debería haber llegado a la Tierra en el siglo XVII y haber sido fácilmente visible en el cielo, parece que el acontecimiento pasó desapercibido. ¿O quizás no? El astrónomo Martin Lunn y la historiadora Lila Rakoczy argumentan que una «nueva estrella» apareció en el cielo el 29 de mayo de 1630, el día en que nació un bebé destinado a convertirse en el rey Carlos II de Inglaterra, Escocia e Irlanda. Esa estrella era la supernova Cassiopeia A. La polémica investigación ha sido presentada en la Reunión Nacional de Astronomía que se celebra estos días en Llandudno, Gales.

La fecha en la que la explosión de Cassiopeia A podría haberse visto en la Tierra ha sido un misterio durante muchos años en la historia de la astronomía, pero el período más aceptado es la segunda mitad del siglo XVII. Lunn, astrónomo en el museo de Yorkshire, y Rakoczy, académica independiente con sede en EE.UU., sugieren en cambio que la supernova podría haber sido vista antes, exactamente el 29 de mayo 1630. Esta fecha es muy conocida por los historiadores por ser el día en que nació el futuro rey Carlos II de Gran Bretaña. Ese importante día, una«estrella del mediodía» supuestamente alumbró el nacimiento.

Rompecabezas astronómico

La aparición de la estrella ha sido ampliamente discutida por los historiadores y estudiosos de la literatura, pero su credibilidad como un acontecimiento astronómico real se ha mantenido en gran parte inexplorado. Lunn y Rakoczy creen que el caso merece una mayor investigación.

«El número y la variedad de fuentes que se refieren a la nueva estrella sugieren que un evento astronómico realmente ocurrió. Nuestro trabajo plantea preguntas sobre el método actual para datar supernovas, pero también conduce a la excitante posibilidad de resolver un rompecabezas astronómico que ha permanecido durante décadas», explica Lunn.

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el dispensador dice: el universo ha sido creado para justificar los "momentos" de cada existencia, por lo tanto no sólo refiere a los reyes sino además a los muchos, los anónimos, los desconocidos, los denominados mortales por derecho propio, por el derecho de sus voluntades y de sus esfuerzos... dicho universo es más sencillo que el de los reyes y los poderosos porque su "entrega" hacia el prójimo es genuina, poca o mucha, pero real... los reyes no saben de sus próximos y desconocen el sentido profundo que implica el ser un "otro". De allí que los antiguos, sabidurías ciertas atadas a filosofías enlazadas con el todo, daban valor al momento del alumbramiento reconociendo sus convergencias cosmogónicas y las confluencias de las señales provenientes de los astros cercanos y de los lejanos, tan distantes que eran invisibles a los ojos aunque no a las almas. Además de ello conferían valor cierto al momento preciso de la gestación, un "valor agregado" a las convergencias cosmogónicas y a sus confluencias astrales y estelares. Indudablemente, carentes de tecnologías electrónicas, disponían de otras mucho más eficientes que brindaban sentido cierto a la ciencia de los momentos, un nicho desconocido por estos tiempos y que ya no forma parte de ningún desfile de ciencias y científicos tal se conocía en el mundo antiguo del oriente persa, nubio, e indo... y que curiosamente se repetía entre nahuas, quichés, mochicas y urus. Los sabios del mundo antiguo y sus sabidurías filosóficas fueron borradas de la historia por el medioevo inquisidor y angurriento de falsos poderes y de pobrezas ajenas. No sólo las novas conforman señales... muchas otras hay que el hombre actual desconoce por su insistencia en no regresar a las fuentes. La rutina de la Tierra recibe forma de los momentos que contienen las convergencias de los miles de millones de anónimos que no figuran en cuadro de honor alguno, que no reciben atención ni consideración de sus reyes ni tampoco de sus gobiernos, que no aparecen en ningún medio porque el trabajo, la voluntad y el propio aljibe de energías no significa noticia para el morbo de los "nadies"... pero hete aquí que las rutinas de los "nadies" son las que contienen el valor genuino de la gracia y su traducción a dones y talentos ejercidos... La astronomía de las ciencias vacías de hoy guardan su nacimiento en el seno de las ciencias filosóficas que contienen los valores cosmogónicos del hombre y sus estirpes. Las ciencias de las conveniencias no suman, antes bien restan y dividen las esencias de las cuales provienen... y hasta que no se regrese a las fuentes, ciencias cargadas de intenciones se alejarán cada vez más de sus sentidos puros. Las coincidencias devienen de las esencias y éstas son parte del verbo causal y sus consecuentes... sin ellos, sin ellas, las novas, las supernovas, las enanas, no son más que etapas en la vida de aquello que se acondicionó para tentar a las almas a dar valor a aquello que lo tiene. Abril 18, 2011.-