Lama Tsongkapa
Qué armadura jamás es atravesada por ningún tipo de arma?
La paciencia frente a los desafíos que brotan de los insultos y los ataques.
La tercera de las seis perfecciones del camino del bodisatva es la paciencia.
Aquí el practicante se adiestra en permanecer dulce y sereno cuando se enfrenta a los tres tipos de pruebas con las que se encuentra en la vida: los daños causados por otros seres vivos, los dolores, y las dificultades con las que se topa en el cultivo de su práctica espiritual.
El Lama Tsongkapa dijo: "la cualidad que mejor adorna a los verdaderos héroes es la paciencia, una austeridad suprema que elimina las emociones aflictivas, un águila que destruye la serpiente del enfado. Yo, un yogui, la he cultivado. Tú que buscas la liberación debes hacer lo mismo".
El maestro indio Shantideva afirmó que el método supremo para cultivar la cualidad interna de la paciencia natural es meditar en la naturaleza vacía de los tres círculos de la experiencia: el propio practicante, objeto que está despertando la ira, y la práctica propiamente dicha. Estos tres círculos no tienen existencia verdadera y son meras ilusiones dibujadas por el pincel del pensamiento conceptual. Son simples etiquetas e imputaciones mentales y están completamente vacías de existencia inherente.
El actual Dalai Lama indicó, en cierta ocasión, que un método convencional eficaz para desarrollar la paciencia es cultivar el hábito de observar el carácter inútil de la mente hostil siempre que ésta surja. Debemos recordar que el objetivo de irritación es un problema que ha de ser resuelto, como una ecuación matemática. Así como un pensamiento claro y sostenido es más eficaz que el enfado cuando se trata de resolver una ecuación matemática, también los problemas con los que nos enfrentamos en la vida son resueltos con mayor eficacia cuando la mente está serena y apacible, que cuando se reacciona con la ceguera del enfado y hostilidad.
Thuk Je Che Tibet
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