domingo, 4 de junio de 2017

CAUSA & EFECTO según "el dispensador"... vaqueano de tempestades humanas (24)

el dispensador dice: el sonido inaudible en el espacio infinito es causa... la música cósmica inaudible es causa... cuando dichas ondas alcanzan un oído, se vuelven consecuencia.   JUNIO 04, 2017.-
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el dispensador dice: el cosmos está contenido por una música celestial cuyos acordes no se detienen jamás... los espíritus incapaces de conferir valor a dicha música la entienden como estática, como ruido, como algo indescifrable... las almas capaces de vibrar con dicha música... no necesitan de la vida para ser... simplemente son en sus propias cuerdas. JUNIO 04, 2017.-
lo que no es cuerda es hueco...
el hueco filtra los sonidos...
el hueco da paso a la materia sónica...
la cuerda suele ser luz...
la armonía está en la cuerda...
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Carmen Conde Sedemiuqse Esquimedes

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LOS CUENCOS TIBETANOS.

Los cuencos tibetanos limpian nuestras células y armonizan nuestro cuerpo. Están hechos de siete metales y estos a su vez tienen relación con los siete planetas visibles: Sol-oro, Luna-plata, Venus-cobre, Marte-hierro, Júpiter-estaño, Saturno-plomo, Mercurio –mercurio. Anteriormente se decía que utilizaban el llamado “hierro espacial” es decir, meteoritos.

También se les r
elaciona con las siete notas musicales (do, re, mi, fa, sol, la, si). Cada cuenco corresponde a una nota musical, pero proyecta además cinco sonidos básicos y una serie de armonías a veces imperceptibles que actúan poderosamente limpiando, activando y armonizando nuestros sistemas internos.

Además relacionados con los siete Chakras: 1º a nivel de la base de la columna, 2º en el hueso sacro, 3º entre el ombligo y plexo solar, 4º en el centro del tórax, 5º en la garganta, 6º entre las cejas o el tercer ojo, 7º en la cúspide del cráneo.

En los Monasterios del Tíbet, el uso del cuenco es una práctica habitual para obtener el estado meditativo, equilibrio de los hemisferios cerebrales y de la polaridad. Los monjes tibetanos conservaban de esta manera un equilibrio total entre el cuerpo físico y los cuerpos sutiles.

El sonido de los cuencos ayuda a mantener la salud a nivel físico. Para esto practican el sonido profundo que llega hasta el nivel celular, haciendo que todas las células reciban el sonido único y personal realizado con el instrumento interno que son las cuerdas vocales y que cada célula reconoce como vibración de bienestar, llevándolas a sentirse en su día a día en perfecto equilibrio y armonía.

Para elegir un cuenco tibetano debemos hacerlo de forma tranquila y paciente, ya que debemos tomarnos un tiempo para sostenerlos uno a uno en nuestras manos y hacerlos sonar, sentir su peso, su particular energía, su forma. Visualmente no tiene nada que ver el que nos parezca más o menos bonito. Lo importante es hacerlos sonar y sentir cómo resuena en nuestro interior.

Los cuencos tibetanos han sido creados con conciencia e intención de ser utilizados como guías en ritos ceremoniales, viajes astrales, el despertar de la conciencia y en la curación de enfermedades tanto a nivel físico, psíquico, mental, emocional y espiritualmente.

Thuk Je Che Tibet


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APRENDE A TOCAR LOS CUENCOS TIBETANOS

El cuenco ha de estar apoyado o sujeto sólo por su base. Cuanto menos ocupe su zona de apoyo, mayor facilidad tendrá el sonido para expandirse. Todo cuenco tiene su punto de resonancia cero, es decir, un lugar donde el cuenco no vibra en absoluto y que suele estar en la zona central de su base.

Si vamos a tocar varios cuencos, o no deseamos tenerlo sobre la mano, se dejará sobre una base blanda que no presione sus zonas laterales. Puede ser un cojín, una alfombra, moqueta blanda, etc. Si lo sujetamos con la mano hemos de dejarla completamente plana, o bien juntar las yemas de los dedos y apoyar el centro de la base del cuenco sobre ellas.

Una vez asentado bien el Cuenco, emplearemos alguna de estas dos técnicas para generar su Sonido y Vibración.

SONIDO POR PERCUSIÓN.- El material con el que batamos el cuenco, la fuerza que empleemos, así como el lugar del golpe, será lo que determiné el sonido que se genere. Generalmente se usa una baqueta de madera que puede estar forrada de piel, caucho o algodón para amortiguar la batida. También se usan los dedos o el puño.

SONIDO POR FRICCIÓN.- Si frotamos el borde del metal con una baqueta de madera o piel, un sutil sonido va naciendo en el cuenco. Al ir aumentando la presión y la velocidad sobre el mismo, crece el sonido y la frecuencia. Una vez encontrado el sonido que más nos agrade, controlar esa presión y velocidad, pues llega un momento en que el cuenco vibra demasiado y puede que la madera chirríe. Hay que tener paciencia hasta encontrar el juego de muñeca adecuado.

SET DE CUENCOS
La experiencia de hacer sonar varios cuencos simultáneamente es muy especial. Los armónicos de unos y otros van chocando y generan un calidoscopio sonoro muy atractivo. Conviene que estén de alguna forma relacionados, bien por su timbre, por su nota o por su contraste. Un Set de cuencos bien equilibrado realza sus cualidades. Aconsejamos formar tríadas de cuencos relacionados por un intervalo de 3ª o 5ª.

Si tocamos el Cuenco y acercamos la cavidad de la boca al borde superior, podemos ir cambiando el timbre del sonido creando una especie de gua-gua. Si golpeamos el cuenco y lo balanceamos sobre nuestra mano, también se produce una variación sonora interesante.

Pero no lo dudes, será tu imaginación, sensibilidad y concentración los mejores vehículos que te guíen en el mejor uso de tus cuencos.

Thuk Je Che Tibet
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