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el dispensador dice:
dependemos del espacio, flotamos en él,
giramos, nos balanceamos, oscilamos,
nos trasladamos de distinta forma según la era en tránsito,
nos contiene el aire, atmósfera divina,
que proporciona un equilibrio,
que aún siendo propio, habilita a la vida,
un tiempo respirable tal lo conocemos...
pero hay otro tiempos, también otros tiempos,
pero hay otros espacios, distintas dimensiones,
superpuestas y contiguas, cercanas y lejanas,
donde la sabiduría no es tiempo,
apenas un hueco en la consciencia de la estirpe,
trasponer dicha ventanas, puertas al eterno,
ameritan un abismo de conocimientos y sapiencias,
aunque todas ellas comienzan en un sólo valor,
el pi, el phi, el 3,14...
existe un equilibrio meridiano,
el de las almas que esperan,
el de las que descienden,
aquel otro por donde están las que suben,
las que respiran y las que vuelan,
ínfimas diferencias de las ambigüedades del pensamiento,
colores, tonos, notas, desenfrenos,
mezclan esencias de vientos, te acaricia la brisa,
cultiva el campo de los sentimientos...
cuando alcanzas la vida, sólo la verdadera,
se terminan la esperas, te nutres del infinito,
sabes que los ciclos, circunstancias y consecuencias,
apenas son consciencias acalladas por un grito,
te dejas caer por la estrella,
te fijas a la matriz esperanza,
trascenderás los espacios respirando agua en un vientre,
tu legado es simiente de creadores y labranzas...
cuando te alumbras a la vida,
descubres que respiras, apenas por un instante,
en realidad es el impulso el que te envió a estos lares,
tribulas en tu tiempo padeciendo un escarmiento,
vivir tiene sus precios, morir sus condiciones,
nos debemos al espacio, al dogma y sus sermones,
aprendemos a ser nada, entre vuelos, velas y terrones,
y aún cuando te has ido acostumbrando,
desconoces tu momento, cuando regresas al descanso,
ya no tendrás cuerpo, volarás alto,
te llevarán de regreso al nacimiento de los santos...
correrás por praderas que habías olvidado,
te encontrarás con tu estirpe, llamada antepasados,
también hallarás a los tuyos que aún no han llegado,
descubrirás la importancia de ser parte del legado,
nadie zafa de este ciclo que por Dios es regulado,
no hay mentiras, no hay pecados,
apenas son errores de las vidas y un pasado,
no te alejes nunca de tus fuentes,
no niegues nunca tus recuerdos,
finalmente verás que todo es un sentimiento...
el dispensador: esencia de eternidades en el día de los seres humanos en la Tierra, consciencia del phi, puerta de dimensiones, pasiones y recuerdos. Marzo 14, 2010.-
DEDICADO A: todos los inquietos que pasan por aquí a nutrirse de locuras, sentimientos genuinos, versos apasionados de un viejo loco y olvidado...
La industria militar, ajena a su impacto ambiental Las guerras son
devastadoras. El primer desastre es la pérdida de vidas humanas que
conllevan. Además de ese horrible impacto, los misiles, las bombas y el
armamento en general afectan directamente a las infraestructuras y los
lugares de conflicto.
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https://www.agenciasinc.es/Opinion/La-industria-militar-ajena-a-su-impacto-ambiental
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