jueves, 24 de septiembre de 2009

génesis

Luisa Beatríz Osdoba (su obra)

hubo una hora cero del pensamiento,
hubo una energía potencial de la idea,
todo estaba expectante,
la quietud todo lo dominaba,
esperando que el caos desatara las confluencias,
el movimiento era lento,
el magnetismo se sostenía acompasado,
las partes conservaban sus espacios,
el tiempo no existía...
los colores eran separados,
hasta que el vacío empujó a las partes,
las que se desataron en loca carrera,
buscando ocupar los huecos
y así el caos tomó forma y fue armónico...
equilibrado, quizás disfónico, quién sabe...
y aún cuando no lo comprendas,
los colores son los que indican los equilibrios,
marcan las proporciones, determinan las tendencias.
los sonidos se expresan en colores,
tanto como las expresiones químicas de los contenidos,
y justamente las ideas, desatan la génesis de los colores,
brindando tonos profundos y otros superficiales,
algunos brillantes, otros opacos,
jugando con las mentes curiosas y con los ojos inquietos,
motivando voluntades y desatando distancias.
apenas somos una fórmula algebraica de la existencia tangible,
apenas somos nota disonante de un pentagrama quebrado,
apenas somos valencia de una composición compleja,
que ha perdido un electrón a cambio de no perder la cabeza.
el dispensador: el magnetismo de los huecos. Septiembre 24, 2009.-
DEDICADO A: Tebas.

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