LA IDEA VIAJERA - El meteorito que sembró la vida en la Tierra - ABC.es

Ciencia
El meteorito que sembró la vida en la Tierra
Científicos encuentran en una roca extraterrestre hallada en la Antártida elementos que pudieron ayudar al desarrollo de la vida en nuestro planeta
ABC / madrid
Día 01/03/2011 - 11.07h1

NASA.

El meteorito hallado en la Antártida liberó amonio, esencial para la formación de moléculas biológicas complejas La teoría de la Panspermia señala que la vida, o al menos los elementos básicos para su fundamento, pudo llegar a la Tierra en una lluvia de meteoritos, una hipótesis que cobra más fuerza a medida que los científicos han decubren compuestos químicos esenciales en distintas rocas espaciales halladas en la Tierra. Una nueva investigación de la Universidad del Estado de Arizona en Tempe (Estados Unidos) y publicada en la revista 'Proceedings of the National Academy of Sciences' (PNAS) viene a reforzar la idea. Los investigadores señalan que han descubierto evidencias de que un meteorito primitivo hallado en la Antártida emitió una gran cantidad de amonio (NH4), un elemento clave para la formación de moléculas biológicas complejas como los aminoácidos y el ADN.

Los investigadores, dirigidos por Sandra Pizzarello, determinaron la composición molecular de los componentes insolubles descubiertos en un meteorito de la Antártida que contenía carbono, recopilando polvo del meteorito y tratando partes de él con agua a altas temperaturas y presiones para después analizar los componentes resultantes del proceso. Los investigadores descubrieron que el polvo de meteorito tratado emitía en el agua circundante amonio, un importante precursor para las moléculas biológicas complejas.

La química del primitivo Sistema Solar

Los autores analizaron los átomos de nitrógeno dentro del amoniaco y determinaron que el isótopo atómico no se correspondía con los descubiertos en la Tierra en el presente, lo que sugiere que el amoniaco no procedía de una contaminación terrestre.

La comunidad científica ha empleado grandes esfuerzos en descubrir el origen del amoniaco responsable de desencadenar la formación de las primeras moléculas biológicas en los inicios de la Tierra. Los descubrimientos sugieren que meteoritos como el analizado, que algunos científicos creen que portan un registro intacto de la química del inicio del sistema solar, podrían haber 'sembrado' la Tierra con los precursores moleculares de la vida.
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el dispensador dice: así como el verbo sostiene el equilibrio universal sin que el hombre lo aprecie ni tampoco le haga honor ni culto, del mismo modo el ideario que deviene de él (verbo consecuente) circula por el espacio libremente conformando aquello que hemos denominado "mundo de las ideas", el que lo hace a modo de los cometas, con órbitas amplias y cambiantes según las necesidades del verbo causal. Ello sucede (se replica) también en los universos paralelos, dimensiones donde anidan otros mecanismos físicos que no entrarían en la cabeza de humano alguno. Así el hombre, luego de su triste paso por el planeta Horus, transformado en un desierto polvoriento y poco amable, se dio el lujo de concebirse a sí mismo (una vez más), esto es regresar al estado de idea, a efectos de verbalizarse... para ello viajó por el espacio sideral como idea, bajo pautas químicas y leyes físicas precisamente descriptas en documentos antiguos cuidadosamente desaparecidos por la inquisición de las vergüenzas (ver geometría del pensamiento) hasta crear en la Tierra (que es agua) un medio no hostil para permanecer. Ello ameritó una convergencia de fuerzas e ideas, elementos que anidan en la esfera y que son esencia del phi. Para sorpresa de las ciencias utilitarias, prescindentes de toda filosofía y de toda ética, dicha idea no cayó en la Antártida sino en un espacio de suelos ya desaparecidos, ahogados por el océano Atlántico, siendo que lo de Antártida es algo semejante a una "astilla" en una constelación. Luego la idea se hizo cuerpo (a sí misma) y tuvo aún el poder para diferenciarse y alcanzar los mecanismos de vida que la precedían desde el verbo original. Lo demás es historia conocida, es decir, desconocida ya que prolijamente fue destruida para que el hoy sea tan confuso como la era de Babel... sin embargo, los ecos persisten aún hoy en todo el universo porque esa es una de las leyes del ideario, latir eternamente y guardar la posibilidad, también eterna, de recrearse. El ideario late con el conjunto de las almas y sus espíritus sosteniendo un puente que demanda vibraciones de energías que transcurren por los agujeros negros a modo de vasos comunicantes donde las leyes físicas del hombre no caben ni tampoco existen... justamente donde lo esencial sigue siendo invisible a los ojos, inaudible a los oídos, pero además, ni siquiera se lo puede pensar cuando se carece de "corazón"... sólo las almas inocentes y humildes alcanzan dicho nivel, suficiente como para perdurar, sostener y darse vida cuando lo creen oportuno. Marzo 01, 2011.-.

"Tomando una vibración romana y comodaticia del verbo causal (original) ese sentido esencial se guarda en el SUM, ES, ESE, FUI... opaca traducción de lenguas extinguidas que lo expresaban con mayor justeza... sólo para entendedores".