El templo Wulong del monte Tiantai
El templo Wulong fue construido en el año 1590, durante la dinastía Ming. Hoy en día el templo cuenta con más de 40 dependencias y está considerado una obra maestra y el conjunto arquitectónico mejor conservado y más importante del estilo tunbao.
Reportaje de
David Sevillano-López
谢大伟
No lejos del condado Pingba (平坝), en la provincia de Guizhou, junto a la ciudad de Anshun (安顺), se levanta el monte Tiantai (天台山), de unos 60 metros de altura y en cuya cima se halla el templo de los Cinco Dragones (伍龙寺, Wǔlóng sì). Como tres de sus lados dan a profundos acantilados, el ascenso hasta el templo solo puede realizarse por su cara sur, a través de una estrecha escalinata que serpentea por un espeso bosque de antiguos pinos.
El templo Wulong fue construido en el año 1590, durante el decimoctavo año de reinado del emperador Wanli (万历) de la dinastía Ming. Más tarde se añadieron nuevas construcciones durante la dinastía Qing, bajo los reinados de los emperadores Kangxi (康熙), Jiaqing (嘉庆) y Daoguang (道光), hasta alcanzar sus dimensiones actuales. Hoy en día el templo cuenta con más de 40 dependencias y está considerado una obra maestra y el conjunto arquitectónico mejor conservado y más importante del estilo tunbao (屯堡).
Una de las principales características del templo es su peculiar estilo de construcción. A simple vista, cuando alguien contempla el monte Tiantai desde lejos, parece como si sobre su cima se levantara un castillo que flota entre las nubes y el espeso bosque que lo rodea. Esta sensación onírica se debe a que la totalidad de las edificaciones que componen el templo se han levantado sobre el mismo borde de los acantilados que las protegen. Su estructura se divide en una parte interna y otra externa. Debido a que en la cima del Tiantai la superficie plana es muy limitada, toda la parte externa de la construcción se compone de unos muros de mampostería que emplean la piedra local. Ello permite la ampliación del espacio de construcción y, por efecto del tiempo, el agua y la erosión, le imprime un aspecto áspero y similar al de las rocas en las que se asienta. De esta forma, los muros parecen una prolongación artificial del acantilado, sobre el que raramente se abren unas pequeñas ventanas, y contribuye así a su parecido con una fortaleza militar. Este aspecto de austera fortificación contrasta con su estructura interna, en la que se suceden diferentes templos y salones profusamente decorados con cartelas y tallas de madera en la parte frontal de los grandes templos. Las inscripciones grabadas en piedra de eminentes personajes que a lo largo de la historia han visitado el templo, o incluso los prominentes aleros de los tejados, adornados con profusión de esculturas, confieren un aspecto innovador y único.
A pesar de sus características constructivas tan particulares, una de las más importantes de este templo es su dedicación al culto de las tres religiones: budismo, taoísmo y confucianismo. En su origen, la primera construcción fue de carácter budista, con posterioridad también se construyeron templos taoístas y, al final de la dinastía Qing, también se sumó un centro de estudio confuciano. Se trata de un fenómeno religioso raro en China. En el templo se suceden una gran cantidad de dependencias: el pabellón del Emperador de Jade (玉皇阁), cuya fachada tiene una superficie de 8,1 metros y sobresale por la decoración de sus tejados; y el templo del Santo Guan (关圣殿), dedicado a Guan Yu (关羽, 160-219), uno de los generales más importantes del periodo de los Tres Reinos (三国, 220-280) a quien el emperador Wanli divinizó en 1614, que se distingue por el gran tamaño de su fachada con un ancho de unos 12 metros. Pero, posiblemente, la construcción más llamativa sea la del templo del Gran Buda (大佛殿), que es uno de los santuarios más grandes de Wulong con un frente de 10,92 metros y 8,42 metros de profundidad. Su fachada está decorada por esculturas de animales sobre las que descansan sus dos columnas principales y el relieve en el que se han inscrito los “veinticuatro deberes filiales” (二十四孝). En su tejado hay cinco dragones de los que toma nombre todo el conjunto de templos. Y, en su interior, se conserva la imagen del Buda Sakiamuni (释伽牟尼佛).
En el año 2000 el templo Wulong fue inscrito por el gobierno chino en la lista de Sitios Históricos Nacionales y Objetos Culturales bajo Protección Estatal.
Publicado originalmente en: Revista Instituto Confucio.Número 32. Volumen IV. Marzo de 2015.Ver el reportaje original en PDF
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