Así fue la mayor tormenta del Sistema Solar
Científicos describen cómo una gigantesca borrasca, diez veces el tamaño de la Tierra, rodeó por entero Saturno
j. de jorge / madrid
Día 19/05/2011 - 22.16h
ESO .Imágenes termales de Saturno
La atmósfera del planeta Saturno se muestra normalmente tranquila y en calma, pero una vez al año -ojo, un año de Saturno son treinta en la Tierra-, cuando la primavera llega al hemisferio norte de este mundo gigantesco, algo se agita profundamente bajo las nubes, provocando una terrible tormenta como jamás hemos experimentado en el planeta azul. Esto es lo que ocurrió en diciembre de 2010, cuando los instrumentos científicos de la sonda Cassini de la NASA, en órbita alrededor del planeta, y un buen número de astrónomos aficionados detectaron una colosal borrasca que tiempo después alcanzó un tamaño diez veces superior al de la Tierra. Fue tan excepcional, tan grande, que algo ocurrido a 1.400 millones de kilómetros de distancia pudo ser visto con telescopios convencionales.
Ahora, el acontecimiento ha sido estudiado al detalle utilizando la cámara infrarroja del Very Large Telescope (VTL) del Observatorio Europeo Austral (ESO) en unión a las observaciones de la Cassini. Se trata de la sexta de estas tormentas terroríficas descubiertas desde 1876, y la primera en ser estudiada en el infrarrojo termal, para ver las variaciones de temperatura, y en ser observada por una nave en órbita.
«Esta alteración en el hemisferio norte de Saturno ha creado una gigantesca, violenta y compleja erupción de nubes brillantes, que se ha extendido para rodear todo el planeta», explica Leigh Fletcher, de la Universidad de Oxford, en Reino Unido, autor principal del estudio.
En el fondo de las nubes
Por primera vez, los científicos han podido revelar las regiones oscuras de la atmósfera y medir los cambios importantes en las temperaturas y los vientos. La tormenta pudo tener su origen en el fondo de las nubes de agua donde un fenómeno similar al de una tormenta eléctrica impulsó la reacción. Al igual que el aire caliente sube en una habitación climatizada, esta masa de gas se abrió paso en la atmósfera superior de Saturno.
Algunas de las características inesperadas vistas por los científicos son las balizas estratosféricas. Se trata de cambios de temperatura muy fuertes en la estratosfera de Saturno, desde 250 a 300 kilómetros por encima de las nubes de la atmósfera inferior. El resultado, todo un espectáculo.
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el dispensador dice: algo llama la atención de tu alma... pueden ser los anillos... puede ser el tamaño del objeto... pueden ser sus colores... no se puede saber qué es lo que reclama el ser visto, pero algo hace que tus ojos hagan foco en la imagen celestial, lejana, de un planeta que el ser humano llama Saturno, pero que constituye un sistema en sí mismo. Aunque muy distante, está cerca... alcanza con elevarse y viajar el espíritu hasta allí para conocer su realidad, tan distinta, tan singularmente disímil a cualquiera de las cosas que nos rodean y que están a la vista... lo cual no impide que dicha realidad se ajuste a pautas que no entran en la mente humana, simplemente porque no la viven, no la comparten, no forma parte de sus rutinas... Aquello desconocido y lejano contiene circunstancias que le confieren un diferente patrón de vida, que puede prescindir del sentido de las formas tanto como el de las expresiones, y no por ello ser menos importantes, menos significantes, menos trascendentes...
una geografía relevante y casi desconocida es observada atentamente por "alguien", observa sí, pero no interviene en dicha realidad porque la misma les es ajena por el sentido de la creación, lo cual implica que su contenido está destinado a otras entidades que dan sentido a sus tiempos, no a los humanos, sí a los propios, intrínsecos del motivo que le confirió un lugar cierto en el espacio sideral, brindándole un tiempo y condiciones que establecen un contexto de equilibrios que le pertenecen sólo a él, a Saturno...
algo llama, eleva la mirada, mueve la curiosidad... ningún detalle puede ser apreciado a simple vista y aquello que puede parecer, también puede no ser lo que se cree ver. Ese es el prodigio que provee la creación traducida en formas, aquello que se siente "conocido" está lejos de corresponderse con cualquiera de las cosas que el humano transita en sus rutinas. La Tierra ha sido nutrida de un escudo protector que preserva la presencia humana, un escudo que contiene el aire que se respira cada milésima de segunda, un escudo que permite la vida tal se la entiende, un escudo que nadie valora porque el afán personal supera aquello que está en condición plena de condicionar el sentido de herencia, ancestro, tiempo y hasta espacio vigente en un momento dado...
mientras tu transcurres tus sueños, otros tienen lugar más allá de Marte, de Júpiter, conteniendo expresiones impensables en el orden neuronal que sostiene la finitud del hombre... ¿qué son esos colores?... ¿de qué se tratan aquellos destellos?... se observa sí, pero nadie puede pretender intervenir en su rutina, porque la creación ha dispuesto que el hombre pertenece a la Tierra, siendo que otros astros tienen las suyas y ésas no deben ser ni invadidas ni tampoco molestadas, apenas visitadas por motivaciones propias de la curiosidad humana, una energía que lo impulsa a mirar por una ventana que aún cuando no se ve como tal, existe... ¿qué sabían los ancestros humanos sobre Saturno?, mucho, lo suficiente como para conferirle un valor primordial de ataduras y silencios que deben ser cuidadosamente respetados...
no lleves paraguas para tus sueños, es preferible mojarse... no lleves mochila para tus sueños, es preferible andar sin lastres... no lleves intenciones para tus sueños, ellos tienen capacidad de proveer las propias y hasta sorprenderte... no lleves esfuerzos para tus sueños, ellos contienen energías que les pertenecen y pueden descender como diversas expresiones... no lleves ilusiones para tus sueños, dicha realidad aparentemente intangible contiene nichos donde cada alma puede anidar en su momento... lleva tu capacidad para recordar, sorprenderte, atender... comprender vendrá después del umbral que comunica aquella dimensión de los sueños y la verdadera vida, con ésta, la del virtualismo de las cargas, pasos lentos, cielos azules o nublados, horizontes claros o nubosos... mírate en el espejo de la fuente de agua que se representa en el oasis de tu propio desierto... mírate, observa tu rostro y da gracias por lo que te ha sido concedido. Toma distancia de la pena y el trajín, aprende a vivir de las esencias, junta tus manos y recolecta agua en ellas... bébela, sé tu mismo, ahora. Es bueno derramar lágrimas por las gracias concedidas, pero no lo es por las turbulencias inducidas por otras negligencias, por otras impericias. No te acerques al abismo, no lo abras, luego de beber, simplemente párate sobre tus pies, anda, mañana siempre queda hacia adelante, justamente hacia el adelante que te espera para revelarte el destino de tu alma. Busca el altar que la divinidad te ha dado por el sólo derecho de nacer, está en tu espíritu, no depende de ninguna otra realidad universal, sólo de ti y de tu voluntad plasmada en dones... No sometas tus deseos a los destinos atribulados de los otros, suficientes son los propios... ofrece compasión y misericordia, abre tus manos y abre tu alma, ése el sentido de tu tiempo respirable... no digas lo que no debes, no pienses lo que no es necesario... tu consciencia contiene las señales, tu ángel de la guarda espera que lo atiendas, hoy, mañana será tarde. Mayo 20, 2011.-
▲ Cassini Solstice Mission: Saturn's Long-lived Storm
Cassini Solstice Mission: Saturn's Long-lived Storm
NASA - Cassini
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