el dispensador dice: no llegué a ninguna cima de los Himalayas, prefiero escalar las laderas de la propia alma... pero sí supe colocar las banderas de oración, colgándolas según la tradición que hoy las ordena en cinco, cuando los ancestros lo hacían por siete, y los ancestros de los ancestros por nueve... pero hoy, que es el día PI... todo guarda su relación y todo se ordena según su significado... donde la bandera de oración "azul" simboliza el cielo y éste con el espacio... donde la bandera de oración "blanco" simboliza el viento y el aire contenido en él... donde la bandera de oración "rojo" simboliza el fuego y la finitud de las cosas... donde la bandera de oración "verde" simboliza el agua y las sucesiones de la vida... donde la bandera de oración "amarilla" simboliza el sentido de los suelos que se pisan... asumiéndose que no todos los suelos se pisan, no todos los aires se respiran, no todas las aguas se beben, no todos los fuegos consumen, pero sí todos los espíritus descienden desde los cielos regresando a sus espacios cósmicos... supo existir una bandera de oración "violeta" que simbolizaba el tránsito de las sabidurías... así como supo existir una bandera oración "gris verdoso" que simbolizaba las contradicciones de los espíritus... y mucho más allá, supieron existir otras dos banderas de oración, la primera era de un tono negro azulado que simbolizaba lo intangible... la segunda era de un tono anaranjado que simbolizaba a las paradojas existentes entre las intenciones y los hechos... todas flameaban en los caminos a las cumbres del tercer polo (Tíbet) donde cada jornada merecía una oración...
las banderas de oración horizontales son llamadas "lung ta" (caballo del viento)... es importante colgarlas en diagonal desde abajo hacia arriba... desde una piedra a un mástil...
las banderas de oración verticales son llamadas "darchor" (donde "dar" es aumentativo y donde "cho" significa "todos los seres sensibles")... éstas son verticales y en el Tíbet cada cosa guarda su simbología y su relación de causa y efecto...
Carmen Sedemiuqse Esquimedes
no puedes caminar los Himalaya sin llevar consigo tu piedra mágica, como no puedes transitar los Himalaya sin colgar tus banderas de oración... lo que allí se escribe, impregna la consciencia de quien lo hace... impregna la intención... impregna la voluntad... revela su karma... expresa y traduce su aura, luego el viento se encarga de difundir los sentidos del ruego...
y todo desciende como gracia... a veces como respuesta... a veces como señal... es necesario estar atento para aprender a descifrar los mensajes que descienden desde la eternidad...
al escribirlas sentía que iba en ellas... me difundía en la fibra y me incorporaba a la tela... siempre cinco, siempre siete, siempre nueve... siempre impar para sintonizar a los universos latentes... allí supe que había pasado varias veces por las cumbres... siendo nadie... porque siendo nadie sé es "alguien" que hace sin decir, sin pedir, sumido en los avatares de los vientos y en las quietudes de las fuentes ocultas... asumiéndose que los destinos que cursan siempre contienen tres vértices... el vértice de la causa... el vértice del doblez... y el vértice del efecto...
si observas con detenimiento, cada pintura es un pensamiento, una bandera de oración flameando esos que son tus sentimientos. MARZO 14, 2017.-
la única cima que merece plantar bandera de oración, está en tu alma.
bandera "darchor"
bandera "lung ta"
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