"...Después me mostró un río limpio de agua de vida, resplandeciente como el cristal, que salía del trono de Dios y del Cordero. En medio de la calle de la ciudad, y a uno y otro lado del río, estaba el árbol de la vida, que produce doce frutos, dando cada mes su fruto; y las hojas del árbol eran para la sanidad de las naciones. Y no habrá más maldición; y el trono de Dios y del Cordero estará en ella, y sus siervos le servirán, y verán su rostro, y su nombre estará en sus frentes. No habrá allí más noche; y no tienen necesidad de luz de lámpara, ni de luz de sol, porque Dios el Señor los iluminará; y reinarán por los siglos de los siglos".
por las cuerdas hallarás tus energías...
por las cuerdas encontrarás tu ventana...
por las cuerdas que sostienen tu ventana, apreciarás la LUZ,
la LUZ te llevará de regreso a la senda del río,
cuesta arriba encontrarás el árbol,
relucirán sus hojas, reflejarán sus frutos,
cuando la intensidad de la LUZ te ciegue...
justo allí habrás alcanzado el final del camino.
Te guiará el sonido del torrente,
te llevará la brisa,
te sustentará el perfume,
pero cuando regreses la mirada...
verás que todo ha sido una ilusión.
El dispensador: dispersando las arenas para que se vean las simetrías.- Abril 20, 2009.-
DEDICADO A: las causalidades de los mensajes, las causalidades de los destinos, las causalidades de las comprensiones.-
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