domingo, 11 de marzo de 2012

LOS NOMBRES EXTRAVIADOS ► Nikola Tesla, el hombre que inventó el siglo XX | Ciencia | elmundo.es

Nikola Tesla, el hombre que inventó el siglo XX | Ciencia | elmundo.es


EXPOSICIÓN | Una muestra en Madrid homenajea al ingeniero serbio

Nikola Tesla, el hombre que inventó el siglo XX

Nikola Tesla sostiene una bombilla en sus manos. | Museo Tesla de Belgrado.Nikola Tesla sostiene una bombilla en sus manos. | Museo Tesla de Belgrado.
Muchos libros de texto todavía atribuyen la invención de la radio al italiano Guillermo Marconi. Su verdadero descubridor, sin embargo, fue el ingeniero de origen serbio Nikola Tesla (1856-1943), el padre de la electricidad comercial y seguramente el más genial inventor del siglo XX. Un hombre que pese a su gran inteligencia, su originalidad y su controvertida personalidad -o quizás debido a ellas- tuvo que hacer frente a numerosos obstáculos en su carrera. Incluso llegó a ser considerado un loco.

Tan brillante como desconocido. En 1943 la Corte Suprema de EEUU retiró a Marconi la patente (por la que había ganado el Premio Nobel en 1909) y reconoció a Tesla como el verdadero inventor de la radio. Aunque éste fue sólo uno de sus numerosos y extraordinarios descubrimientos, su enorme aportación a la ciencia sigue siendo desconocida por buena parte del público.

Patente del control remoto. | Foto: Museo Tesla de BelgradoPatente del control remoto. | Foto: Museo Tesla de Belgrado
Hasta el 29 de marzo, la Real Academia de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales de Madrid acoge 'El maravilloso mundo de la electricidad de Nikola Tesla' una exposición itinerante que recuerda su fabuloso legado.

De hecho, muchos le consideran el mayor genio de la humanidad detrás de Leonardo da Vinci. Ambos aportaron ingeniosas soluciones en campos muy diversos, transgredieron los límites científicos de su época y anticiparon inventos que transformarían la vida de los ciudadanos mucho tiempo después.

Miguel Ángel Alario y Franco, presidente de la Real Academia de Ciencias, explica que con esta muestra pretenden mostrar la gran contribución de Tesla a la ciencia y situarle en el lugar que merece. "Fue muy bueno tanto como científico como ingeniero, algo que no es frecuente", señala.

Fue un auténtico visionario. Descubrió la corriente alterna, la televisión, la lámpara fluorescente de neón, el radar y fue un pionero en el control remoto y la robótica. De hecho, los vehículos que han sido enviados a Marte se basan en sus hallazgos.

Problemas económicos

Sus invenciones hicieron ganar mucho dinero a aquellos que las pusieron en práctica, aunque él, que nació en el seno de una familia muy humilde, tuvo problemas económicos durante la mayor parte de su vida y murió arruinado.

Nacido en 1856 en Similjan (una localidad que pertenecía al imperio Austrohúngaro y que en la actualidad forma parte de Croacia), su padre era un pastor ortodoxo. Su madre era analfabeta, aunque Tesla estaba seguro de que ella había heredado sus fabulosas capacidades intelectuales. Desde pequeño podía aprenderse de memoria libros completos y era capaz de realizar complejas operaciones matemáticas que deslumbraban a sus profesores.

Sin embargo, nunca fue capaz de obtener beneficios de su inteligencia ni de sus grandes hallazgos. Marconi no fue el único que se aprovechó de sus descubrimientos. Conoció a Thomas Edison en 1884, cuando se trasladó a Nueva York. Antes, se había formado en Austria, donde estudió ingeniería mecánica, y en la entonces Checoslovaquia, donde se formó en Física.

Su enfrentamiento con Edison

Tras trabajar en varias compañías telefónicas y eléctricas de Europa decidió cruzar el charco. En su bolsillo llevaba una carta de recomendación escrita por uno de sus colegas en Europa: "Querido Edison: conozco a dos grandes hombres y usted es uno de ellos. El otro es este joven".

Edison contrató a Tesla para que mejorara sus diseños de los generadores de corriente continua. Pese a que el ingeniero serbio cumplió con creces los cometidos que le asignó Edison, éste se negó a pagarle la recompensa de 50.000 dólares que le había prometido.

El 'huevo de Colón' de Tesla. | Real Academia de CienciasEl 'huevo de Colón' de Tesla. | Real Academia de Ciencias
Ni siquiera accedió a subirle el sueldo por lo que Tesla, decepcionado y enfadado, abandonó su compañía y se centró en sus investigaciones sobre la corriente alterna, que finalmente lograría imponerse al sistema de corriente continua defendido por Edison. Su colaboración con la Westinghouse fue clave para lograrlo.

El padre de la electricidad comercial

La exposición ha sido organizada en colaboración con la Embajada de Serbia y el Museo de Nikola Tesla de Belgrado, que desde 1952 custodia el mayor archivo sobre su legado. La muestra se centra en sus logros científicos y no tanto en los aspectos de su controvertida personalidad.

La exposición Universal de Chicago, celebrada en 1893, simbolizó el triunfo de las ideas del ingeniero. Bautizada como 'El mundo del mañana', fue un escaparate de los avances de la ciencia y la tecnología en el que Tesla dispuso de su propio espacio y del de la compañía para la que trabajaba, la Westinghouse. Se construyó todo un complejo de edificios y parques. En un pabellón se colocaron 12 generadores bifásicos de Tesla, cada uno con una potencia de 1.000 caballos y una frecuencia de 60 Hz.

Los visitantes podrán examinar maquetas de algunos de sus descubrimientos (dos son interactivas). Una de ellas explica el funcionamiento del llamado huevo de Colón de Tesla. Se trata de un modelo de motor de inducción con rotor en forma de huevo. El transformador de Tesla (o bobina de Tesla) servía para generar corriente de alto voltaje y alta frecuencia.

También se exhibe una maqueta de la central hidroeléctrica del Niágara, la primera que operó en el mundo y de la que Tesla fue el artífice. Durante la noche del 15 al 16 de noviembre de 1896 se consiguió, por primera vez, transmitir electricidad a larga distancia con fines comerciales. Utilizando el sistema polifásico de corriente alterna de Tesla, la electricidad fluyó desde el Niágara hasta la ciudad de Buffalo, situada a 32 kilómetros de distancia.

El ingeniero serbio también estudió los rayos X y sus aplicaciones en medicina, inventó la iluminación fluorescente y fue un pionero en el desarrollo del control remoto. En 1898 hizo una demostración de su pequeño barco teledirigido en el río Hudson de Nueva York, del que se puede ver una maqueta en la exposición.

Tesla, que no cesó de hacer arriesgados experimentos durante toda su vida, murió en 1943 en el Hotel New Yorker, solo y en extrañas circunstancias. Según recuerda Massimo Teodorani en su biografía sobre el ingeniero, fue hallado muerto varios días después de haber contactado con las autoridades para hacer su propuesta del llamado rayo de la muerte, un arma en la que había trabajado hasta el final de su vida.

Después de que el FBI fuera alertado, muchos de sus artículos sobre este tema fueron considerados confidenciales. Según sostenía Tesla, su rayo de la muerte hubiera podido abatir o neutralizar los motores de diez mil aviones a una distancia de 400 kilómetros. Oficialmente, Tesla, que tenía la nacionalidad estadounidense, falleció de un ataque cardiaco.

En 1960, la Conferencia General para Pesos y Medidas que se celebró en París acordó que la medida de inducción magnética en el Sistema Internacional de Medidas fuera bautizada como Tesla, una de las decisiones que seguramente más ha contribuido a sacar su nombre del olvido.

La Real Academia de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales de Madrid acoge hasta el 29 de marzo la exposición 'El maravilloso mundo de la electricidad de Nikola Tesla'. Puede visitarse de lunes a viernes y la entrada es gratuita.
el dispensador dice: el Siglo XX fue un siglo donde la humanidad comenzó a atraparse en los apuros y ellos la condujeron a las urgencias... así como el medievo europeo sumió a una sociedad en el peor de los oscuranstismos, del mismo modo, el Siglo XX condujo a la humanidad toda a un permanente estado de zozobra, convirtiendo al hombre en una pieza descartable según los antojos de los otros (pocos). Hay tres grandes hitos que han quebrado y hasta borrado la historia de la humanidad (la verdadera)... el incendio de Alejandría [que se ve acompañado por el vaciamiento de la Biblioteca de Pérgamo, entre otras]... la inquisición eclesiástica y sus genocidios a escala [que se ve acompañada por la justificación de la barbarie del descubrimiento y la conquista]... Hiroshima y Nagasaki como actos de barbarie científica [que dan lugar a que los aliados cuenten una historia que está muy lejos de la realmente cursada, y con ello, permitieron la tergiversación de los hechos al mejor estilo de los cronistas de Indias, entre otros y no los únicos]... ello ha dado lugar a una historia de "escuelas", que se estudia, pero poco o nada tiene que ver con la realidad de sus tiempos. Algo semejante a una historia de cera que comienza en el cuatro mil antes de cristo según los criterios del primitivismo antropológico francés y sus socios británicos... pero aún cuando se lo pretenda de dicha forma, las pirámides estaban en el lugar que ocupan desde diez mil años antes que apareciera la civilización egipcia... y algo semejante sucede en la América, donde se atribuye a unos lo que corresponde a los "desconocidos" y a los "olvidados". Ya no guarda importancia, sí lo hace el correlato... el mediatismo se ha preocupado en borrar ciertos nombres de las historias de las ciencias unidas al pensamiento filosófico y ético, para permitir la construcción del espacio de las ciencias de las conveniencias, de los oportunismos, aquella que roba la propiedad intelectual para luego patentarla como propia y venderla al mejor postor... una ciencia despersonalizada que habilita a arrasar con la vida de los otros, consumiéndoles los destinos que no son foco del interés de los gobiernos ausentes y de los estados "carentes". Nikola Tesla no fue la única víctima, antes bien lo ´han sido y lo son la mayoría de sus pares... prolijamente "ninguneados" al sólo efecto de "levantar" a aquellos que, como buenos oportunistas, favorecieron el asalto a las ideas de los otros, los verdaderos mentores. No obstante ello, la historia humana se registra en una biblioteca monumental que el ser humano no ve durante el curso de su destino, tampoco con sus ojos, ni siquiera con su alma, porque no forma parte de los tiempos respirables ya que se ubica contigua al libro de la vida y al árbol de la vida... y allí, justo allí, todo lo que vive cada hombre y cada mujer se graba implacablemente, tanto es así que allí quedan registradas las palabras y las intenciones que había detrás de ellas, asimismo los actos a favor de sí mismo y a favor de los otros, y desde luego, los actos que han sido ejecutados en contra de sí mismo y/o en contra de los otros... también quedan estampados los sueños soñados, las esperanzas, las ilusiones, las frustraciones, las inducciones, las burlas, los desprecios y las vanidades... curiosamente, esa biblioteca que pertenece a los ámbitos de la creación, contiene al verbo causal, el motor de todo lo que existe... y tan grande es, que cabe en la palma de una mano santa, en el seno de un espíritu puro, en el nido de un alma inocente. Al verbo se lo identifica con Dios, claro está, pero la creación es mucho más que eso y no está en la razón del hombre, como tampoco de la mujer, poder acceder a dicho ángulo de los conocimientos, porque para ello hay que despojarse de los egos... de allí, que al llegar a los tiempos respirables, dominen las miserias humanas que desean apropiarse de los esfuerzos y las voluntades ajenas, para luego borrarlas de la historia que será escrita según el antojo de las estatuas y sus mentiras, de los mármoles y sus silencios implacables, de las imaginería incierta que niega lo explícito para crear santos que facilitan la compra y la venta de las dignidades inexistentes. La verdadera historia humana es aquella que aún no ha sido escrita, y de hecho, no necesita hacerlo ya que en la Biblioteca celestial no hay lugar para las discreciones, tampoco para las intenciones... lo que hiciste es lo que está impregnado en sus libros, en sus paredes, en sus pisos, en elementos que se desconocen en el aquí pero que imperan en el allá, por los siglos de los siglos. Marzo 11, 2012.-

No hay comentarios: