NI IMAGINAS LO QUE HAY ALLÍ

el dispensador dice: y vi cuando las palabras pronunciadas eran llevadas por los vientos, dispersando intenciones ocultas, para luego retrucar con un "no miento"... y supe que aquello que había oído, no eran más que excusas para ganar tiempo, sorteando el pasado cierto de miradas, incertidumbres, voluntades y pensamientos... es extraño el espíritu humano, cuando parece tenerlo todo, es justo cuando comienza a perderlo... despreciando lo concedido... pretendiendo modificar el destino según lo señala un dedo... creyendo que el poder es moneda y que lo que se compra, se vende y se negocia no es más que el desconcierto... es raro el espíritu humano, habla de Dios en cuchicheos de templo, para inmediatamente darle la espalda, aduciendo que lo que cambian son los sentimientos...
vi que la llama de la vela flameaba sin haber brisa, señal que alguien anda apurado y que su alma anda de prisa, hay remolinos que indican cosas, y es de sabios guardar silencio cuando las señales hablan de lo que se no teje ni se descose... comprendí entonces que los remiendos estaban en la consciencia, gastada de mezquindades, de necedades e impaciencias... como ves, dije, todo se sabe, apelando a la perspectiva de la montaña, donde está la paz del uno mismo, allí está el santuario de tu montaña...
ascender las laderas suele de ser sabios intensos... pero permanecer es sólo cosa de genios... es mucho lo que hay que entender, cuando el mensaje aparece en sueños... hay quienes creen que desechar es lo mejor para atravesar sus tiempos... hay quienes creen que descartar contribuye a sumar al poder que arrastran por indicación de terceros... unos y otros andan desorientados, porque no hay puntos cardinales en el cosmos de la rosa de los vientos...
tal te he dicho, no pude irme y de a poco lo fui aprendiendo... el Tipitaka me abrió la puerta para que se iluminara el entendimiento, algunas sales iban quedando en la playa de mis esperanzas, y otro poco en la de mis sueños... aprendí entonces a desprenderme, dividiendo los sentimientos, encontré una geometría donde redundan los paralelos, me introduje en ángulos opuestos y hallé el camino del medio, allí me sumergí en soledad sabiendo que me acompañaba la consciencia como si fuese eco...
desde entonces que no he regresado, y para mí es que no he vuelto, me he quedado recluído en las ideas donde los motivos dan lugar al aliento... y tal como lo ves en la imagen, ése ha sido mi puerto, aunque me han dicho que allí sólo se puede permanecer, hasta que se complete la siembra del propio huerto... y así lo he comprendido, sin preguntar lo innecesario... mientras contemplo sigo observando, dónde han ido a parar los humanismos de los humanos...
no puedes amar con la mano... ni es suficiente el ojo... el oído suele ser antojo, de aquello que no se lee entre líneas, porque lo más peligroso de la intención, es lo que se oculta tras bambalinas. SEPTIEMBRE 25, 2017.-