Alcalá se ‘cervantiza’ para acompañar su semana más literaria
70 actividades preceden a la entrega del premio más importante en castellano
Falla dedicada al 20 aniversario de la declaración de Alcalá como Ciudad Patrimonio, presidida porel cardenal Cisneros. RICARDO ESPINOSA
Alcalá de Henares
El fantasma de la literatura recorre Alcalá. Cada 23 de abril, la ciudad se convierte en la capital de las letras gracias a Cervantes, que da nombre al premio literario más importante en castellano. El nicaragüense Sergio Ramírez recibe este lunes el galardón en la Universidad, pero la fiesta se vive en sus calles desde el viernes. El Ayuntamiento ha programado 70 actividades durante el fin de semana para contagiar el ambiente literario entre sus vecinos.
Pasacalles, música, teatro, talleres y la quema de una falla: hay actos para todos los públicos. “Tenemos que añadir también el Festival de la Palabra, que se celebra estos días”, explica María Aranguren, concejal de Cultura. El viernes el grueso de las actividades se concentra en las bibliotecas Cisneros y María Zambrano, que adaptan obras teatrales como Oliver Twist para los más pequeños. A las 19.00, también en la biblioteca Cisneros, una tertulia recupera a las poetas olvidadas de la generación del 27 y, una hora más tarde, el Teatro Cervantesalberga diferentes conciertos musicales. El día siguiente organiza unas jornadas de puertas abiertas.
El sábado a las 11.00 se entregan los premios La Posada de Hojalata y a mediodía un cuentacuentos hará las delicias de los niños en la biblioteca Cisneros. A las 17.00 habrá una gymkana y, una hora más tarde en Santa María la Rica, Elvira González-Calero presenta el poemario Tiempo de lluvia. A las 19.00 en el Corral de Comedias se homenajea al escritor Eduardo Menticutti con la presencia de Almudena Grandes, Luis García Montero y Benjamín Prado. A esa misma hora en la Calle Mayor se ofrecen “cócteles literarios”. La jornada se cierra a las 22.00 con un juego de rol ambientado en los libros. “El objetivo es crear una cultura viva donde los ciudadanos sean protagonistas”, indica el alcalde, Javier Rodríguez Palacios.
Quema de una falla
El plato fuerte tendrá lugar el domingo. A mediodía Los Susurradores de las Tres Culturas recorren Alcalá, que en su día albergó barrios judío, cristiano y musulmán, recordando antiguos cantares sefardíes, poemas místicos castellanos y versos moriscos. A esa misma hora un pasacalles infantil desde la plaza de los Santos Niños hasta el Teatro Cervantes amenizará la mañana a los más pequeños. A las 20.00 otro pasacalles transportará a los visitantes hasta el siglo XVII a través de la música y de la danza. Participan 10 bailarinas y seis músicos ataviados con trajes de la época. “Nuestra función es ir recogiendo a la gente para llevarla hasta la plaza de la Paloma”, avanza María José Ruiz, directora artística de Esquivel Danza y Música.
El colofón tendrá lugar a las 21.00 con la quema de una falla realizada por maestros valencianos. Esta dedicada al 20 aniversario de la declaración de Alcalá como Ciudad Patrimonio de la Humanidad y se inspira en sus edificios y personajes más emblemáticos. Lo forman seis ninots y tiene una superficie de 20 metros cuadrados. En la cúspide “se encuentra Cisneros, que diseñó la ciudad”, explica Raúl Martínez, su creador. Junto al cardenal, ofreciéndole el testigo, está Cervantes, que ya fue el protagonista de la escultura del año pasado, elaborada también por estudio Chucky.
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