sábado, 29 de octubre de 2011

ETERNIDADES

foto: Estados Unidos de Norteamérica|Daniela Lombardini-Matías Cerasale|2011

el dispensador dice:
testigos de eternidades,
consecuencias respirables,
del verbo pronunciado,
todo lo que ha existido,
ha sido parte del llamado,
aquello que ha sido legado,
es custodio de pasados,
de presentes, de dameros sin dados,
de mañanas esperados,
de todo aquello pensado,
tal vez hasta lo soñado,
las esperanzas que se han tejido,
pueden haber sido abrigos,
de las huellas que han dejado,
ancestros caminando,
algunos han andado,
confundiendo sus tiempos,
otros han encontrado alientos,
para pintar nuevos cuadros,
aquello que han visto,
todo lo que se les ha mostrado,
ha servido para ser luz,
en el ideario compensado,
lo que pudo ser abandonado,
por algún otro habrá sido amado,
las migajas que caen de la mesa,
las que el viento moja con cerveza,
puede ser alimento de aves,
también puede ser letra en los mares,
hasta dieta de los aires,
que respiran los que pasan,
buscando entender dónde pisan,
cuál es lo que trazan,
pero la vida no sólo es línea,
mucho más es geometría,
aquello que no miras,
se aleja de la impaciencia,
lo que no guarda consciencia,
no cultiva gracia ni esencia,
si lo que perturba es tormenta,
se nublan las experiencias,
puede parecer un árbol,
pero apenas es parte de tierras...

las gentes andan corriendo,
tras comodidades y bienes,
que les restan tiempos,
para cultivar sentimientos,
andan rodeados de cosas,
que se pierden por los vientos,
lo que no se los quita el ajeno,
se diluye entre inciertos extremos,
dicen andar leyendo,
profecías y recuerdos,
se han olvidado la FE,
entre trastos del altillo,
ya no hay dedo para anillo,
ni compromiso que acierte,
caminan escupiendo muerte,
o envidiando de otros su suerte,
mas nadie produce esfuerzo,
la ventaja aparece como culto,
de circunstancias de apuros,
el que no ve claro aquel burro,
no es capaz de atender susurros,
si no elevas la mirada,
no hay guía que revele las pisadas...

afectos se compran y venden,
sin apreciar la bondad de los puentes,
los hilos que se cortan,
se facturan tras la muerte,
aquel que quiebra su palabra,
será sepulturero sin pala,
de reclamos y demandas,
todo lo que se anda,
lo que se vive, lo que se miente,
es observado permanentemente,
por ángeles sin vientres,
por consciencias sin sombras,
aquello que por costumbre se burla,
donde los altares se rompen,
donde los santos se esconden,
suele ser fuente de furias,
odios y hasta desprecios,
la gracia que fue abandonada,
será piedra atragantada,
justo al final del túnel,
cuando se te pregunte que has hecho,
con la gracia que fue pensada,
concedida y luego olvidada,
entre aquellos trastos viejos...

nada se da por añejo,
ni siquiera el licor más agrio,
la tierra que fue legada,
la naturaleza concedida,
la viña que fue enseñada,
hasta las uvas no recogidas,
te aseguro han sido contadas,
una a una y en detalle,
el sayo que no cabe,
pertenece a aquel que ha aceptado,
ser observador y despreciado,
ser buscador de lo olvidado,
todo aquello que se ha quitado,
lo burlado y lo robado,
guardan senda de regreso,
a las manos que han cultivado,
desde la nada a lo cierto,
quien no entiende la señal,
no podrá pasar por muerto...

he visto crecer el árbol,
he visto mudar la tierra,
el polvo que no te acompaña,
es alimento de arañas,
quien vive sin sus mañanas,
termina ahogado en añoranzas,
si la paz no reina en el alma,
si el paso no lleva calma,
no habrá grito ni clamor,
que explique lo que arrecia,
las tristezas que se siembran,
van atando recuerdos,
lo que se enlaza al pasado,
anda consumiendo legados,
y cuando los dones se pierden,
y los talentos se evaporan,
se quiebran todas las horas,
aún cuando se crean viviendo...

justo cuando el tiempo se detiene,
se regresa a la verdadera vida,
hay un espíritu que espera,
y otros que lo acompañan,
cuando la palabra se pesa,
cuando el sentimiento es el fiel,
no hay balanza que soporte,
aquello que ha sido cruel,
las intenciones se revelan,
ante la luz de una vela,
lo dicho por la espalda,
es estampa de manchas,
robar el destino de otros,
no sirve para nada,
y allí no hay queja ni carga,
que no quepa en lo que se embarga,
allí no se pierde la vida,
apenas son pedazos de alma...

testigos de eternidades,
amo los árboles que he plantado,
desde una semilla,
por aquello que supe, pensado,
ellos me han acompañado,
cuando las circunstancias han atropellado,
lo que pude haber creado,
ya no importan los pasados,
no se vive de recuerdos,
no se corre donde hay lerdos,
tampoco donde retozan los cerdos,
siempre hay una senda del medio,
para dejar reposando los miedos,
si la entrega es lo hecho,
la FE será pertrecho,
de huellas sin tiempos,
lo que se tejió en la inocencia,
será de eternidades presencias,
más vale que se entienda,
el que tenga oídos atienda,
el que descubre el manto,
los azules y los blancos,
se perderá entre sus llantos,
de instantes que no recuerda,
no se estire tanto la cuerda,
los testigos son todos santos...
Octubre 29, 2011.-
"... he descubierto mis playas, no guardan costa ni arena, tampoco tierra ni aguas, se bañan con lágrimas que las almas van dejando, por ello ando caminando por dónde han dejado huellas, no pretendo seguir a nadie, ya ha pasado mi tarde, de mi nadie se acuerda, he desatado mis cuerdas, mis promesas son campanas, todo lo que han ido dejando, algunas cosas que han tirado, otras que han abandonado, las he ido recogiendo para legarlas a otras vidas que cultiven sentimientos, sé como bendecir otras almas sin que las atrape el tiempo o sus vientos, si lo que siembran es inocencia los compensaré con luces de pensamientos."
Muchas gracias a Alicia María Abatilli y su Centenario de Afectos...
Muchas gracias a Daniela Lombardini y a Matías Nicolás por permanecer en la estancia de los afectos eternos...
Dedicado a: los que entienden las eternidades.

No hay comentarios: