miércoles, 30 de agosto de 2017

ACERCAMIENTO || 'El hombre que se creía Vicente Rojo', de Sònia Hernández: El ibis y el pintor | Babelia | EL PAÍS

'El hombre que se creía Vicente Rojo', de Sònia Hernández: El ibis y el pintor | Babelia | EL PAÍS

El ibis y el pintor

Sònia Hernández brinda 'El hombre que se creía Vicente Rojo', un libro filosófico enormemente atractivo por su claridad y su lenguaje cercano y coloquial



El ibis y el pintor





Echar una mirada a la legendaria portada de Cien años de soledadilustrada por Vicente Rojo sería un buen preludio a la lectura de la nueva novela de Sònia Hernández (Terrassa, 1976). El título ya nos advierte de que no es el verdadero Vicente Rojo el que interviene como personaje en una narración que trata de quiénes somos y cómo nos conducimos. Una novela que se enmarca en la época actual, pero haciendo abstracción de situaciones políticas y sociales explícitas, para incidir con mayor peso en otras cuestiones, la dificultad de constituirse uno mismo como persona o la manera incontrolada en que se dan los acontecimientos. Cuestiones de interés filosófico que, sin embargo, no impiden que sea una narración que atrae enormemente por su claridad, su lenguaje cercano y coloquial y por el interés de lo que sucede. En Los Pissimboni, una obra extraña pero magistralmente escrita, procedió la autora de otra manera, dando prioridad a lo enigmático y lo borroso. El cambio de tercio le ha ido muy bien y llega a alcanzar momentos tan buenos como en la novela anterior. El lector se siente copartícipe de esa periodista digamos “fracasada”, madre de una quinceañera, con “sobrepeso” como ella va repitiendo, que nos habla como una amiga que se confiesa limpiamente de sus dudas, indecisiones y desengaños.
Hay a lo largo del texto una batalla antigua y fecunda: la lucha entre la belleza y la fealdad. Berta, la hija adolescente, cree que solo es capaz de percibir las cosas feas de la vida y por tal motivo pide a su madre que le consiga como mascota un ibis eremita, el ave más fea que ha podido encontrar. Su madre, en cambio, se refugia en la belleza acogedora de las formas lineales de las pinturas de Vicente Rojo que va recopilando mediante la Red. Leve y suave es el final como corresponde a una historia como ésta donde la evolución de los sentimientos es lo más importante. Podemos acordar que se realiza el deseo de la narradora sin nombre: “Que es posible el equilibrio y que estoy cerca de alguna verdad”.
COMPRA ONLINE 'EL HOMBRE QUE SE CREÍA VICENTE ROJO'
Autor: Sònia Hernández.
Editorial: Acantilado (2017).
Formato: tapa blanda (144 páginas).

No hay comentarios: