desde abajo la torre parecía inalcanzable...
la escalera interminable...
de dónde sacar el aire para subir?...
lo importante era llegar a la cúspide...
tan lejana... ¿para qué?...
no había que preguntarse para qué...
sencillamente, aparecía necesario subir.
tenues luces jugaban con la mente...
produciendo un raro efecto de ángeles y demonios.
poco a poco, la voluntad podía más que el racionamiento inútil...
alguien te empuja y cuando quieres acordarte ya estás camino hacia arriba...
no hay detrás... alcanza con ascender... sin pensar en el esfuerzo...
que no te dan las piernas?... sí, no te dan...
que los pulmones parecen rebotar contra el corazón?... sí, pero respiras...
que el corazón se te va a salir del pecho?... sí, pero aún está ahí...
y parece que el final no llega jamás...
cuanto más asciendes, más escalones hay y grande es la distancia al objetivo...
vaya a saber por dónde vamos, no?
sí, la voluntad es más poderosa que la razón, ¿sabías?...
el dispensador: las torres de la Catedral de Köln, Alemania. Visiones de la espiral ascendente de la vida. Junio 21, 2009.-
DEDICADO A: los que no temen el esfuerzo aún no sabiendo para qué es...
No hay comentarios:
Publicar un comentario