Nunca he comulgado con las fechas...
Tampoco con días designados al antojo del oportunismo
de los distintos ámbitos del poder, cualquiera sea éste.
Mi vida fue construida en la FE de una madre ausente, cuyo espíritu fue tomado al llegar quien suscribe al tiempo respirable.
De allí que entienda que el día, son todos los días,
prescindiendo de la fecha, la hora y ajustándonos al compromiso eterno
de la pertenencia bajo la condición del respeto eterno
por el destino escrito de cada quién.
No pronunciarás palabra que ejerza daño en el alma del prójimo.
Porque la palabra tiene fuerza para crear...
pero también guarda otra semejante para destruir.
Bajo esta consigna el VERBO es expresión eterna de CREACIÓN,
y sin llegar a ser "divina" es suficiente,
justa y necesaria, para atender el afán diario que impone el Señor
mediante sus rutinas de misterio y evocación,
convocando la voluntad al esfuerzo que demanda el LIBRO DE LA VIDA.
A tal efecto vale recordar la liturgia expresada en Lucas: 6, 36-38.
"Jesús dijo a sus discípulos: Sean misericordiosos así como el Padre de ustedes es misericordioso. No juzguen y no serán juzgados; no condenen y no serán condenados; perdonen y serán perdonados. Den y se les dará. Les volcarán sobre el regaso una buena medida, apretada, sacudida y desbordante. Porque la medida con la que Ustedes midan, también se usará para ustedes"-.El dispensador: esperando que el mundo se una en oración.
DEDICADO A: todos los que han asumido que sólo la oración salvará al mundo.
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