viernes, 8 de mayo de 2015

AGUA ▲ Y… ¿dónde queda el Sáhara? >> Blogs EL PAÍS

Y… ¿dónde queda el Sáhara? >> Blogs EL PAÍS

Lapices
En el Sahara, desde hace mucho tiempo, hay grandes poetas que lanzan al mundo un par de versos con la intención de que otro gran poeta los continúe. Hasta que no aparece alguien a la altura de la calidad de los primeros versos, el poema queda incompleto. Y así, poco a poco, se va construyendo un poema con muchas voces. De manera paradójica, comenzamos con una Despedida, el título del poema que inaugura la sección de la mano del poeta Larosi Haidar. Dice así…

Cuán dulce es amar
y sentirse a la vez amado
pero amargo es el dejar
a quien tanto se ha esperado.

¡Poetas! os animamos a participar y así completar, esperamos, un gran poema coral.

Intentar mostrar la riqueza de la cultura saharaui. Ese es el objetivo de este espacio. Una cultura nacida de la narración oral, de los bellos paisajes del desierto, de las vidas nómadas y el apego a la tierra, de su origen árabe, bereber y musulmán, de sus costumbres únicas y de la relación con España que se remonta a más de un siglo. Una cultura vitalista, condicionada por una historia en pelea por la supervivencia desde 1975. Coordina Sukeina Aali Taleb

SOBRE LOS AUTORES

Sukina Aali-TalebHija del exilio, Sukina Aali-Taleb nació en Madrid por casualidad, de padre saharaui y madre gallega. Es miembro del grupo de escritores La Generación de la Amistad Saharaui y coautora del libro "La primavera saharaui, los escritores saharauis con Gdeim Izik", tras los acontecimientos de El Aaiún, en 2010. Periodista y profesora de Lengua Castellana y Literatura en institutos públicos de Madrid. Como no puede ser de otra manera, apoya al Frente POLISARIO en proyectos de ayuda a su pueblo, refugiado y abandonado a su suerte en Tinduf (Argelia), desde hace cuatro décadas.
Roberto MajánRoberto Maján, ilustrador. Le gusta decir que fue el último humano nacido en su pueblo; piensa que eso lo hace especial. Y que su abuela se empeñó en llamarle Roberto en memoria de Robert Kennedy asesinado cuatro días antes. En la época en que nació y se bautizó, el Sahara era español, en el mal sentido de la palabra. El lo sabía por las cartas que recibía de su tío Ramón, destinado allí en su servicio militar. Los sellos que las franqueaban prefiguraron el universo imaginario que tratará de recrear en las imágenes de este blog.
Bahia Mahmud AwahBahia Mahmud Awah. Escritor, poeta y profesor honorario de Antropología Social en la Universidad Autónoma de Madrid, natural de la República del Sahara Occidental. Nacido en los sesenta en la región sur del Sahara, Tiris, la patria del verso y los eruditos. Cursó estudios superiores entre La Habana y Madrid, donde reside. Pertenece al grupo de Escritores Saharauis en lengua castellana.
Willy VeletaWilly Veleta. Willy Veleta consiguió su licenciatura de periodismo de una universidad estadounidense (ahí queda eso) y ha trabajado en todos los canales privados de TV en España… de los que huyó cuando se dio cuenta de que querían becarios guapos. Ahora es profesor de periodismo en inglés y prepara su tercer libro, una novela sobre los medios.
Liman BoichaLiman Boicha. Se licenció en Periodismo en la Universidad de Oriente en Cuba. Después de una larga ausencia regresó a los campamentos de refugiados saharauis y durante cuatro años trabajó en la Radio Nacional Saharaui. Actualmente reside en Madrid. Ha publicado Los versos de la madera y ha participado en varias antologías de poesía saharaui: Añoranza, Um Draiga, Aaiún, gritando lo que se siente, entre otras. Forma parte del grupo poético Generación de la Amistad Saharaui y es miembro de la Asociación de Escritores por el Sahara-Bubisher.
Larosi HaidarLarosi Haidar. Tras el alto el fuego, se instaló en Granada, donde se licenció y doctoró en Traducción e Interpretación. Actualmente es profesor de esta misma disciplina en la Universidad de Granada y ha publicado varios trabajos relacionados con la cultura saharaui. También ha participado en varias antologías de poesía saharaui.



Memoria de agua [05]

Por:  04 de mayo de 2015
Memoria_de_agua_05                                                                                            Ilustración de Roberto Maján
AGUA – Sukina Aali-Taleb
El agua nunca pesa en la carga del camello,
me dice al oído una dulce voz de mujer.
Cuando el sol amenaza con su aliento cálido,
y se hace imposible avanzar un paso más,
el agua no pesa, no.
Cargué entonces mi mochila con agua para el camino,
y dejé atrás mi camello, dejé también mi jaima,
vestí otras ropas, y me calcé unos zapatos nuevos .
Me  adentré en tierras de alquitrán y lodo,
donde los árboles crecen negros,
y a veces el ruido no te deja pensar.
Donde no hay descanso para el viajero,
y sientes que unas manos te aprietan el corazón
y no te sale la voz.
El agua nunca pesa en la carga del camello,
oigo entre risas decir a los niños.
Avancé entonces, recorriendo caminos,
esos zapatos pensé, me llevarán lejos.
Salté por encima de los pozos,
de agua, estancada,
me equivoqué, confié, también lloré lágrimas,
de agua.
Pero el agua en mi mochila nunca faltó,
el agua no pesa, no.
El agua nunca pesa en la carga del camello,
me llegan voces antiguas
del desierto del Sáhara y de la montaña verde,
no olvides llevar agua, pequeña.
El agua es vida, te calma, te salva,
agua dulce para curar heridas,
y junto al agua,
carga bien tu mochila de otras cosas,
las cosas valiosas no pesan.
No te arrepientas de dar y ser generosa.
El agua nunca pesa en la carga del camello,
y  al cerrar los ojos, me sumerjo en el recuerdo,
y siento en mi nuca el suave hálito de los que se fueron.
El agua nunca pesa, pequeña.
No seas tonta. No te arrepientas.
el dispensador dice:
si no miras donde pisas,
desconoces el suelo...
si no sientes el aire que respiras,
no sabes qué aire es el que respiras...
si no conoces la fuente de la que bebes,
deconoces qué agua bebes...
si no sabes qué fuego atizas,
no sabes de fuegos... tampoco de cenizas... mucho menos de briznas...
todo lo que envuelve cada vida,
es una gracia que se sostiene,
de manera cierta pero efímera...
si reconoces las estrellas,
y las arenas por donde transitas, 
sabrás hacia dónde vas... o quizás hacia dónde caminas...
lo importante al alcanzar el cruce,
es que sepas elegir la esquina,
atendiendo a la fuente que te guía,
mientras bebes de tu consciencia,
y tu ángel te señala la brisa...
entonces,
debes saber reconocer,
que sólo pesa... aquello que la voluntad no lleva...
que sólo pesa... lo que el esfuerzo no eleva...
MAYO 08, 2015.-
si en la memoria de tu karma,
recuerdas cuál es tu destino,
no permitas que nadie te diga qué hacer,
ante las geometrías de tus pasos,
y ante los ángulos de tu camino.
a veces me pregunto dónde queda el Sahara...
justo debajo de tus pies,
donde la arena te detiene,
donde tu ángel se para...
donde tu consciencia... habla.

No hay comentarios: