El infortunio del último emperador inca, que murió por su dominio del ajedrez
Día 18/07/2014 - 17.01h
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En los primeros años de presencia española
en América, Atahualpa cayó preso por las tropas de Pizarro...
pero fue su injerencia en una partida entre españoles lo que
terminó de sentenciarlo
Cuentan que el último emperador del actual Perú, de nombre Atahualpa, era un hombre muy inteligente pero poco diestro en el arte de la guerra, que necesitó trece batallas para derrotar a su predecesor en el cargo de emperador.
Su reinado comenzó en 1532 y fue tan breve como desafortunado, pues el 15 noviembre de ese mismo año fue arrestado por las tropas de Francisco Pizarro. Explica Ramón J. Sender en su libro «Túpac Amaru» (Navona), que Atahualpa debía ser un hombre muy listo, queaprendió a jugar al ajedrez solo, sin que nadie le enseñara, solamente observando cómo lo hacían sus captores.
Una tarde, un grupo de capitanes encargados de su custodia en el Palacio Real se entretenía jugando al ajedrez. Lo hacían sobre un tablero pintado en la mesa y con figuritas hechas de barro. Un día, mientras Hernando de Soto yAlonso Riquelme jugaban, fue el primero a mover un caballo cuando el emperador inca le tocó el hombro y le dijo: «No capitán. La torre. Mejor la torre». Hernando se fió se aquel indio y pocos movimientos después dio jaque mate a Riquelme.
Las lágrimas de Pizarro
Tal y como relata el libro de Ramón J. Sender, hay quien cree que el inca no habría sido condenado a muerte de no haber aprendido los secretos del ajedrez. Su sentencia fue acordada por votación en un tribunal de 24 jueces, uno de los cuales era Riquelme, perdedor aquella tarde en la partida de ajedrez. El tribunal de 24 jueces impuso la pena capital a Atahualpa por 13 votos a 11.
Riquelme fue uno de los que votó a favor de aquella ejecución. De no haberlo hecho, la votación habría dado un empate a doce y Atahualpa habría salvado la vida. Cuentan que Pizarro, a sus 54 años, rompió llorar por tener que ejecutar a aquel hombre, que había llegado a ser su amigo.
hay muchas maneras de expresar las ignorancias,
tanto como las hay para expresar las mezquindades,
tanto como las hay para traducir las miserias contenidas en el alma...
los incas ancestrales,
no aquellos que se encontraron "convergentes" con la conquista española,
sino los anteriores de los anteriores,
contenían conocimientos matemáticos superlativos,
donde los números eran letras o palabras,
según la forma y el tamaño del nudo...
hubo algunos infiltrados en el "nuevo mundo",
que intentaron documentar dicho juego de combinaciones...
ecuaciones complejas del pensamiento humano,
confluyente de espacios exteriores,
cosmogónico en esencia,
pero otras miserias y peores mezquindades,
fueron logrando despedazar y confundir los vestigios de los nudos ancestrales de la "vieja cultura" de los antes, de los antes, de los antes de los incas contemporáneos de la conquista...
el ajedrez como juego,
no traduce su verdadero contenido...
matemático y geométrico,
y quienes lo "juegan",
desconocen sus ángulos de sabidurías,
así como pasan por alto sus valores numéricos subyacentes...
aquellos que sabían de nudos,
letras y palabras numeradas,
números con fonéticas alteradas,
decimales con etimologías variadas,
habían descubierto una sinfonía de sentidos ocultos,
entre tablero y sus piezas...
un razonamiento de otros pensamientos,
meditaciones de otros tiempos...
a veces...
la sabiduría se traduce en infortunio...
a veces...
la palabra se torna inadecuada...
a veces...
el momento se vuelve contradictorio,
confrontando simpleza con miseria,
y como casi siempre sucede...
la miseria humana es suprema,
porque contiene el atropello del desprecio,
nutrido de soberbias que son intolerantes por fibras,
y cuando la miseria prevalece,
el infortunio se instala en el destino ajeno,
poniendo en evidencia que la ignorancia se impone sobre la habilidad superior...
¿sabes?,
la luz...
tiene numerología propia,
fundada en ecuaciones que le pertenecen por derecho de eternidad...
¿sabes?.
la luz...
tiene geometría propia,
fundada en una espacialidad que aún no se descubre...
no se descubre porque el humano anda denso,
no sólo con piés pesados,
peor aún, con alma pesada,
tan pesada que le impide ver,
tan pesada que le impide oir,
tan pesada que le impide entender...
cuando la luz se recoge en sí misma,
imperan los infortunios.
¿se entiende?
JULIO 18, 2014.-
cuando el ajedrez se vuelve juego,
abandonando su ecuación de sabios...
la luz se evapora,
poniéndose a resguardo de las miserias humanas.
allí comienzan los infortunios... de la humanidad.
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