DÍA DE ACCIÓN DE GRACIAS

el dispensador dice:
. gracias Señor por este día, por el de ayer, por el anterior y por los pasados
.. gracias Señor por los sueños recibidos, revelados y plasmados en reflexiones y pensamientos
... gracias Señor, por la luz de mi tiempo
.... gracias Señor, por los dones y los talentos
..... gracias Señor por las gracias concedidas y también por aquellas no concedidas
...... gracias Señor por tu mano y tu guía, en silencio, sin reclamos, acompañando la vida, su árbol y su libro, la huella y su camino
....... gracias Señor por enseñarme el valor del espíritu
........ gracias Señor por darme comprensión para entender el sentido del alma y su esencia
......... gracias Señor por abrir mi esencia al sentido de la misericordia, la compasión y la piedad
.......... finalmente Señor, gracias por revelarme el sentido místico del tiempo y la importancia angular del mañana necesario



no hay un día para dar gracias ya que la vida misma es una gracia, revelada cada día que se la transita, cada amanecer, cada atardecer, cada anochecer, cada descanso, cada afán, cada idea. Lo importante de esta vida es entregarnos humildemente a la voluntad del Señor y su trilogía de verbo y creación, haciendo culto a la oración sincera, esa que nace en el alma y nunca se apaga, siguiendo la senda sin pedir nada a cambio, dando lo mejor de nosotros mismos a cada paso, sin escatimar esfuerzos, resignándonos a su voluntad tanto en la luz como en las tinieblas, aprendiendo a diferenciar el bien del mal, procediendo con suavidad y guardando la paz suficiente y necesaria para brindarla allí donde nos toque estar, pasar, transcurrir... debemos dar gracias por nuestras risas y también por nuestras lágrimas... debemos dar gracias por nuestros padres y también por nuestros ancestros, aquellos conocidos y aquellos de los que no guardamos memoria... debemos dar gracias por los afectos concedidos y también por los quitados, por los legados y también por los negados, ya que todos tienen un sentido superior que no debemos razonar, simplemente aceptar porque así lo impone el verbo de eternidad que nos trajo, nos lleva y nos conducirá de regreso a las praderas de la eternidad... debemos dar gracias por los hijos y por los nietos, así como también por aquellos que nacerán sin que nosotros podamos conocerlos ya que llevarán algo de nuestra estirpe, de la simiente, ecos del espíritu santo corporizado en cada uno de nosotros... debemos dar gracias por los alimentos que hemos recibido y recibiremos a lo largo del tiempo que nos ha sido concedido... y llegado este día, gracias Señor por librarme del sentido humano de las competencias, sus calamidades y sus estados de caos, indicándome la importancia de enterrar las lanzas y liberar el espíritu de envidias, odios y soberbias. Gracias Señor, gracias por enseñarme tu santuario... ¿qué más?... Noviembre 25, 2010.-


"cuando entiendes el sentido de las arenas del desierto, habrás comprendido el valor del oasis y hasta quizás hayas hallado el santuario mayor, el propio"

un gloria por este día y por todos los días...
Gloria a Dios, nuestro Señor.
Gloria al Hijo, su palabra.
Gloria al Espíritu Santo, nuestra esencia.
Gloria a la Virgen Madre de todos nosotros.
Por los siglos de los siglos,
por el poder y la gloria de nuestro Señor,
Amén

dedicado a: TODOS. Noviembre 25, 2010.-