el dispensador dice:
no,
ningún hombre le puso mano,
suelen no andar por allí los humanos,
ningún hombre pudo haberlo pintado,
porque no hay color que pueda ser pensado,
ni paleta que contenga algo que no puede ser soñado,
y te internas allí,
como ventana de un presente dado,
y te dejas perder,
a sabiendas que te vas encontrando,
que puedes escuchar cómo te late el corazón,
porque se trata de un lugar de culto,
un espacio que merece ser honrado,
con silencios,
prestando ojos que se van adentrando,
ascendiendo colinas hacia ningún lado...
y escuchas a tu consciencia,
y ves a tu ángel, el que te está cuidando,
y simplemente te unes a las soledades,
confundiéndote en un largo abrazo,
sabiendo que aunque te alejes,
tu espíritu se ha visto reflejado,
en la bendición de haber llegado,
a admirar tanta naturaleza,
que sólo a ti... se te ha enseñado.
AGOSTO 26, 2014.-
No hay comentarios:
Publicar un comentario