FANTASMAGÓRICO
Carmen Conde Molins Sedemiuqse
Carmen Conde Molins Sedemiuqse
Carmen Conde Molins Sedemiuqse
el dispensador dice:
fantasmas de sueños en llamas,
rojos intensos,
brumas descalzas,
parecen fuegos,
son sólo montañas,
hablando de piedras,
de culturas que escalan,
hace falta lectura,
para descubrir de qué se trata,
respirar suma experiencia,
mientras la memoria se sube al karma...
pareció verse un Sol,
que faros y guías demandan,
ciertos verdes que se derraman,
puede ser un bosque,
tal vez un árbol,
quizás es llanura... como pradera plana...
cosmogonías de geometrías,
donde el ayer será mañana,
donde el atardecer es progresión apagada,
rojos intensos,
yuyos encendidos,
pareciera que hablan,
cristales estallando,
calores que desgranan,
algo está ocurriendo,
en la Tierra humana...
te dije que eran árboles,
violáceos que rozan el alma,
se ven hojas rojas,
otoños desperezando calmas,
pastos entremezclados,
buscando espíritus que se engañan,
imágenes que se recrean,
mientras renace alguna esperanza,
sólo la paz genuina,
sirve a la herencia humana,
los que aún no nacen,
vienen por lo que reclaman,
hace falta tranquilidad de suelos,
respirando lo que se ama,
para ello hay que respetar a los duendes,
tanto como a las hadas,
sin ellos el espíritu del bosque,
termina siendo nada...
creí haber visto a Carmen Molins,
descendiendo de la montaña,
aunque quizás fue la Luna,
cuadrangulando ascenciones lejanas,
uno nunca sabe que pasa dentro de las llamas,
pero te aseguro que entre ellas hablan,
las he escuchado decirse,
que la existencia depende de la esperanza,
si no sueñas con colores,
las acuarelas se derraman,
y cuando ellas se escurren,
lo que se evapora es el alma.
AGOSTO 11, 2015.-
dedicado a: Carmen Conde Molins Sedemiuqse y a su arte
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