Ciencia
Esto es lo que ocurre cuando un «bombazo» solar golpea la Tierra
Día 25/03/2013 - 10.35h
Un fantástico vídeo en «time lapse» muestra los efectos de la eyección de masa coronal del 17 de marzo
Vídeo: Göran Strand
Aurora Borealis 2013-03-17
El pasado 17 de marzo la mancha solar AR 1692 lanzó directamente hacia la Tierra una eyección de masa coronal (CME, por sus siglas en inglés), una nube ardiente de partículas y radiación enviada al espacio y que alcanzó nuestro planeta dos días más tarde. El fantástico vídeo sobre estas líneas fue elaborado por el astrofotógrafo Göran Strand de Östersund, Suecia. La llamarada solar era de clase M1, no la más potente que puede producir el Sol (esas son las de clase X), pero sí lo suficientemente poderosa para provocar una eyección y convertir el cielo de la Tierra en un espectáculo de colores.
Según su intensidad (que depende del flujo de rayos X emitidos, medidos en watios por metro cuadrado) las llamaradas solares pueden ser de categoría A, B, C, M y X. Cada clase, subdividida a su vez en números del 1 al 9, es diez veces más potente que la anterior.
El vídeo en «time lapse» de Strand muestra el espectáculo celeste entre las 19.20 y las 23.35 del día 17.
Cuando las llamaradas solares apuntan hacia la Tierra, esas ardientes nubes de plasma pueden llegar alcanzarnos y causar daños en los satélites de comunicaciones y en los sistemas eléctricos. Pero el escudo magnético de la Tierra, la magnetosfera, es capaz de protegernos de una gran parte de las CME, desviándolas hacia los polos y provocando espectaculares auroras como las de estas imágenes que merece la pena disfrutar.
el dispensador dice:
nos iremos acostumbrando,
a un suelo inquieto,
a un mar inquieto,
a un aire espeso,
a mirar a lo lejos,
a estar atentos,
atendiendo a los vientos...
nos iremos acostumbrando,
a un espacio distinto,
a un SOL inquieto,
donde todo está distante,
pero no demasiado lejos,
pudiendo convocarnos,
hasta provocar mudarnos,
juntando nuestras manos...
nos iremos acostumbrando,
a sentirnos humanos,
a valorar lo que vivimos,
cuando a los ojos nos miramos,
cuando un abrazo nos damos,
cuando las manos nos estrechamos,
porque nada es eterno,
cuando de corazones hablamos...
nos iremos acostumbrando,
a pensar lo que "pensamos",
a reflexionar lo que decimos,
antes de pronunciarlo,
porque recién ahora comprendemos,
que hay puntos... de los cuales no regresamos...
y que cuando ciertos límites cruzamos,
lo que se rompe implica daños...
nos iremos acostumbrando,
a mirarnos como hermanos,
a saber que si no somos solidarios,
nuestra propia gracia deshoramos,
que si no tenemos misericordia,
nos gana la discordia,
que si no tenemos compasión,
lo que se nos funde es nuestro corazón...
nos iremos acostumbrando,
a no traicionarnos,
a no mentirnos,
a no despreciarnos,
a ser simplemente lo que somos,
antes de negarnos,
antes de alejarnos,
antes de burlarnos,
y mucho antes... mucho antes de disculparnos...
nos iremos acostumbrando,
a merecer lo que portamos,
a merecer lo que legamos,
a valorar lo que decimos,
a vvalorar lo que pensamos,
porque si todo eso hacemos,
porque si todo eso logramos,
entonces, sólo entonces,
podremos llamarnos humanos.
Marzo 27, 2013.-
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