Gregorio Morán: "El problema de la censura ahora es un asunto económico, no político"
El periodista presenta su libro 'El cura y los mandarines', vetado por Planeta, donde analiza la cultura y la política española entre 1962 y 1996
El periodista Gregorio Morán (Oviedo, 1947) ha presentado esta mañana en Madrid El cura y los mandarines, donde repasa con visión crítica a los protagonistas de la cultura y la política en España entre 1962 y 1996. La obra, publicada por Akal, llega acompañada de una gran controversia, ya que inicialmente fue un proyecto que Morán preparó para la editorial Crítica, del grupo Planeta. La inclusión de un capítulo sobre la Real Academia Española (RAE), donde enjuicia con dureza al anterior director Víctor García de la Concha, algunos de sus integrantes y las normas de la casa, provocó el desencuentro entra la editorial y el autor. "Ya había corregido las segundas pruebas y tengo la portada. La cuestión es que salía el libro en la misma fecha que el Diccionario de la RAE [publicado por Espasa, un sello de Planeta]. El problema de la censura ahora no es un asunto político, es un asunto económico", ha señalado durante un desayuno de prensa en el café Comercial.
Cuando saltó la polémica, la editorial indicó que el libro tenía pasajes que podrían dar lugar a querellas, aunque el autor aseguró que la razón del veto estribó en las 11 páginas dedicadas a Víctor García de la Concha. En la trayectoria de Morán hay otros títulos que se enfrentaron a trabas editoriales y silencios mediáticos, aunque el autor asegura que ningún caso puede equipararse a este. "De este descaro no he tenido, yo estoy convencido de que Planeta no volverá a cometer esta torpeza", explicó. El periodista acumula una larga serie de libros valiosos para retratar la historia contemporánea de España, como Adolfo Suárez: historia de una ambición (1979),Miseria y grandeza del Partido Comunista de España 1939-1985(1986), El precio de la transición (1991), El maestro en el erial(1998) o Los españoles que dejaron de serlo (2003).
El ensayo presentado esta mañana recorre a través de 800 páginas la evolución de la cultura y sus lazos con la política durante las últimas cuatro décadas del siglo XX. Morán comenzó a trabajar en el libro en 2003 con el afán de responder a una cuestión que detalla en el prólogo: "¿Qué fue sucediendo para que las figuras críticas de nuestra cultura de los años sesenta -el cura Jesús Aguirre, por ejemplo, entre más de un centenar que pudieran citarse– se fueran haciendo cada vez más conservadoras, hasta convertirse en institucionales?".
Jesús Aguirre, a la postre duque de Alba consorte, es la figura que actúa de hilo conductor del texto. "El cura Aguirre era un personaje del que todo el mundo hablaba mal. El círculo de su trayectoria es alucinante: está en las huelgas mineras del 62, en el contubernio de Munich, oficia la única misa por Grimau tras ser ejecutado, él estaba en todo... pasa de la defensa de la lucha armada a ser duque de Alba. Me fascinaba por qué había esa animosidad hacia Jesús Aguirre, que sufría el desdén de su propio grupo. No le consideraban un igual y, sin embargo, yo le veo como el más representativo", expuso Morán en la conferencia de prensa."¿Qué pasó con todos aquellos intelectuales que en los sesenta fueron progres, en los setenta moderados, en los ochenta conservadores y en los noventa carcas", agregó.
Morán decidió concluir su repaso en 1996, cuando el triunfo electoral del Partido Popular supone un fin de ciclo político, que había estado dominado por los socialistas. "La llegada del PSOE, en una sociedad no muy habituado a la crítica, fue un cáncer cultural", afirmó el periodista, que recordó una cita de Rafael Sánchez Ferlosio: "En la cultura el PSOE nos compró a todos".
1. el mundo de los economistas, de los financistas, de los usureros, de los banqueros, de las monedas y sus monederos, de los prestamistas, o lo que es lo mismo, el mundo de los "agujeros" no se ha dado cuenta que al saturarse los equilibrios matemáticos de las variables, se han invertido los resultados de cualquier ecuación, y que lo que durante siglos funcionó para beneficio de pocos, ya no lo hace ni lo hará más... agregando zozobra social... incorporando desintegración social... instalando un burn-out global...
2. lo mismo acontece en el mundo de la política... su componente humano se ha quedado sin capacidad de lectura, no puede leer las señales de la realidad como tampoco puede interpretarla, porque en esencia no tiene capacidad para discernir lo que ve, lo que escucha, lo que lee, entonces se somete al que mejor paga por bajo la mesa, esto es la corporación que está libre de escrúpulos, de moral así como de valores...
3. las sociedades humanas están divorciadas del modelo económico en cualquiera de sus formas y expresiones...
4. las sociedades humanas están divorciadas de los políticos y sus vacíos, a sabiendas que ellos son una estirpe arácnida que sólo seca víctimas y no más que eso...
5. la corporación militar provee inteligencias sin neuronas... depredadores caracterizados por un hambre atroz, todo lo tragan, pero no tienen razón de existir porque sólo son funcionales a los intereses de las corporaciones propietarias de las almas vacías de los políticos y de los espíritus vacíos de los economistas...
6. la corporación eclesiástica, asumiendo en ella a todo lo vinculado con algún Dios, se ha separado de Dios y de sus principios universales, asociándose ilícitamente con todo aquello que hace al negocio que denigra la condición humana del otro a partir de la necesidad de la presencia constante de la pobreza como eje social...
7. la cultura que sobrevive como puede es la denuncia... la que despierta a los otros y los llama a la rebelión por indignación, antes que sea demasiado tarde...
8. la anti-cultura es impuesta por y desde la corporación de medios porque le ha sido encomendado el estupidizar a la raza humana, induciéndola a la degradación mórbica, mucho sexo seca neuronas decían las abuelas... aquí lo que se está secando es la dignidad... la capacidad de darse cuenta que los adelantados han sido enviados a llevarse todo a cambio de luces de colores...
9. la censura es netamente económica... si no me gusta lo que dices, no trabajas... no tienes acceso al aplauso, ni a la medalla, ni al beso, ni qué hablar al podio, al que subirán sólo los mediocres que son colaboracionistas del modelo hitleriano del imperio globalizador...
10. el poder ya ha entregado su alma... por ende carece de dignidad y al hacerlo carece de valores para agregar... el demonio está suelto asumiendo distintos roles y variando su forma y su rostro según las circunstancias, a veces es alienígena, a veces es reptilíneo, a veces es dinosauresco, a veces no sabe lo que es... no obstante ello, sigue siendo siempre el mismo demonio... el que ha invadido todas las estructuras humanas transformándolas en máquinas de impedir...
11. cualquiera que no entregue su alma al diablo, correrá la mala suerte de la persecusión y la muerte... y ni siquiera se salvará siendo ganado por el silencio de los miedos, porque el diablo distingue a ángeles de misioneros... él establece los mecanismos para sancionar al que despeja las ecuaciones de la incertidumbre... por ende la censura es netamente económica... condena al sólo efecto de sostener el imperio de las ignorancias...
12. una humanidad ignorante no sólo no avanza, también involuciona o retrograda hasta consumirse. Cuando se secan los despertares de la cultura que agrega valor, el humanismo se seca mediante las censuras. DICIEMBRE 02, 2014.-
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