domingo, 27 de octubre de 2013

TU PLUMA, MI ESENCIA ► El sonido de la naturaleza | elmundo.es

El sonido de la naturaleza | elmundo.es


RÁFAGAS EN OTOÑO


Carlos de Hita



Y de pronto todo se precipita.

Pasadas las primeras semanas de tiempo suave y seco, la otoñada hace su aparición. Las lluvias riegan la península de este a oeste; los árboles viran del verde al amarillo y al rojo; los bosques se llenan de setas. Y los cielos de voces.

Con el cambio de color el paisaje sonoro cambia de tonalidad.  Oleada tras oleada, el campo se llena de nuevos gritos. Durante unas semanas van llegando todas las aves migrantes que bajan del norte de Europa para pasar aquí el invierno Son muchas, y muy variadas, pero las más llamativas ya las conocemos.  Los bandos de grullas trompetean desde los altos. Tras ellas llegan otros bandos tanto o más vocingleros. Miles de gansos grises, los ánsares silvestres, vuelan en formación hacia el sur.

Y por debajo de este dosel sonoro pasan cosas más menudas, igual de ruidosas: las chillonas gaviotas reidoras, los grandes cormoranes y sus gruñidos, toda la tribu de los patos y un grupo aparte al completo, el de las aves limícolas, los pájaros de las orillas y los limos. Entre ellos, entre sus silbidos, destacan los zarapitos reales, las avefrías y los bandos de correlimos.



Foto
Un bando de grullas. | Carlos de Hita

Pero una vez que pase la ráfaga, instalados ya todos aquí,  a los campos volverá el silencio que anuncia el invierno.  Como los colores de las hojas, el breve resplandor sonoro del otoño habrá durado poco.


el dispensador dice:
observo tu estirpe,
contemplo tu porte,
admiro tu vuelo,
llamados y sonidos,
indican que el tiempo andado,
no se ha perdido...

ráfagas frías,
ráfagas calientes,
alas desplegadas,
sentidos presentes,
vuelo majestuoso,
sueño envolvente...

aunque no puedas quitar tus pies del suelo,
sí puedes desprender tu alma del cuerpo,
puedes elevarte buscando otros cielos,
puedes recalar en diversos puertos,
puedes reconocer otros concedidos suelos,
puedes descubrirte soñando otros sueños...

el alma tiene plumas,
que filtran los vientos,
cuanto más alto es el vuelo,
más esencias encontrarás en el descenso.
OCTUBRE 27, 2013.-

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