martes, 7 de abril de 2015

SADDHA


SADDHA.

Del sánscrito shraddha, fe y confianza; a través del pali.

En el budismo, esta palabra define el concepto de fe, que puede entenderse --según las diferentes tradiciones-- como "devoción", "energía espiritual" o "creencia"; en cualquiera de sus formas, la fe se considera importante al inicio del camino de salvación, necesaria antes de experimentar en uno mismo la verdad de Buda; después ya no es necesaria.

De este modo se consideró en la tradición hinayana: virtud subordinada previa al conocimiento; sólo la sabiduría nos permite alcanzar la salvación.

Surgió entonces el bhakti, una escuela que, sin dejar de adorar a las mismas divinidades, concebía estas en forma humana con el fin de acercarlas al pueblo; consideraba la compasión una virtud equiparable a la sabiduría.

Finalmente, la escuela mahayana fusionó ambos aspectos y defendió lo que podría llamarse un "budismo de la fe".

Siguió considerándose la fe como un elemento secundario para los iniciados que elegían seguir la senda del conocimiento, pero necesario para una gran mayoría de gentes que no podían comprender en toda su extensión la profunda metafísica contenida en el dharma.

Se trataba de hacer accesible a todos la posibilidad de salvación, desarrollando métodos que igualaban a sabios e ignorantes, pobres y ricos, puros e impuros.

En este sentido consideraban la fe de igual valor que la sabiduría.

Thuk Je Che Tibet.

SADDHA.

Del sánscrito shraddha, fe y confianza; a través del pali.

En el budismo, esta palabra define el concepto de fe, que puede entenderse --según las diferentes tradiciones-- como "devoción", "energía espiritual" o "creencia"; en cualquiera de sus formas, la fe se considera importante al inicio del camino de salvación, necesaria antes de experimentar en uno mismo la verdad de Buda; después ya no es necesaria.

De este modo se consideró en la tradición hinayana: virtud subordinada previa al conocimiento; sólo la sabiduría nos permite alcanzar la salvación.

Surgió entonces el bhakti, una escuela que, sin dejar de adorar a las mismas divinidades, concebía estas en forma humana con el fin de acercarlas al pueblo; consideraba la compasión una virtud equiparable a la sabiduría.

Finalmente, la escuela mahayana fusionó ambos aspectos y defendió lo que podría llamarse un "budismo de la fe".

Siguió considerándose la fe como un elemento secundario para los iniciados que elegían seguir la senda del conocimiento, pero necesario para una gran mayoría de gentes que no podían comprender en toda su extensión la profunda metafísica contenida en el dharma.

Se trataba de hacer accesible a todos la posibilidad de salvación, desarrollando métodos que igualaban a sabios e ignorantes, pobres y ricos, puros e impuros.

En este sentido consideraban la fe de igual valor que la sabiduría.

Thuk Je Che Tibet.

Thuk Je Che Tibet
el dispensador dice:
si te he concedido mi confianza,
no la traiciones mientras transites tu estancia...
la vida no es cuestión de promesas,
sino de hechos agregados como valor... ante cada circunstancia...

mi Fe me pertenece,
porque es parte de mi consciencia,
e integra también mi karma,
por ello será prudente,
que tu propia Fe crezca al amparo,
de una vida que sea honrada...

finalmente recuerda,
que así como te dado mi cuerda,
el camino no es cuestión de palabras,
sino de hechos en silencio,
porque las soledades... solas se amarran.
ABRIL 07, 2015.-

No hay comentarios: