TREN DE CARGAS

Las Parvas
Pueblos BuenosAires


Mari Lauquen

Tandil


Udaquiola

Uribelarrea


el dispensador dice:
ví el tren a lo lejos,
sonidos a rieles viejos,
cargas de tiempos,
culpas de muchos pesos...

emoción de saberme viejo,
nostalgia de recuerdos añejos,
sed de exámenes de magisterio,
universidad de silencios,
divergencias y desencuentros...

nieblas bajando,
brumas subiendo,
la estación más cercana,
se ha perdido en ladrillos que suenan a hueco...
retumba el corazón viejo,
se oye el estampido de aquello anduvo latiendo...
no es un tren de cargas,
sólo trae recuerdos,
bocina que se escucha a campo traviesa,
donde ya no quedan los traviesos...

es así, 
lo veo en sueños,
parece estar detenido,
pero sólo es un eco,
el maquinista es un muñeco,
que optó por la soledad,
de conducir lo pendiente,
de un destino que viene de lejos,
de tan lejos viene... que ni siquiera recuerdo...
si soy alma,
o tren fantasma que provoca miedos...
lo importante en la vida,
es andar suelto de pensamientos,
porque siempre hay quien pretende estaquear,
al indio rebelado tanto como al otro que prefiere el silencio...

ni siquiera tengo caballo,
ando de a pié,
y a tranco lento,
sé que me faltan muchas leguas,
y que casi no me queda aliento,
pero tengo el espíritu libre,
como para encontrarme con lo que pienso...
he dado muchos abrazos,
y me he quitado los puñales que me han atravesado,
por los cinismos de aquellos que asaltaron mi provecho...
allá viene el tren,
ése que me llevará tan lejos,
que me ausentará de mi propio tiempo...
tal como te dije alguna vez,
sensaciones encontradas de frecuentes desencuentros,
disfrutá ahora de la razón que dices tener,
porque tu problema comenzará,
cuando el mío se junte con los vientos.
ABRIL 18, 2015.-