ESQUINA DE GERMANIA

Germania (Gral Pinto) 
Pueblos BuenosAires









el dispensador dice:
hay suelos que se confunden con los cielos,
silencios lejanos,
para los que nos vienen siguiendo,
asumiendo que todo suena raro,
tal como lo dijo el abuelo...

su mirada no andaba perdida,
sus ojos no estaban extraviados,
tal vez le dolía el espíritu,
de tanta soledad arrastrada,
de tanta palabra desteñida,
pero estoy seguro que él sabía,
que era demasiado grande la mentira,
aquella que le había ganado,
la partida de la vida...

había andado en Germania,
y aún anda su fantasma, todavía...
nadie se va de aquí,
sin ver su semilla prendida,
a veces no es el árbol elegido,
pero cada quien planta lo que gracia le concede,
bajo cierta consigna,
de que a pesar de todo... deberás honrarla con una sonrisa...

se me fue y no pude abrazarlo,
al menos no como quería,
me ha sucedido tantas veces,
que la ausencia me gana... a sabiendas que cuenta con mi sonrisa...
lágrimas son lo que me sobran,
a pesar de los años,
a pesar de las arrugas,
a pesar de la barriga...

veo muchos parajes cercados,
no eran así mientras tus ojos seguían los días...
y muchos más se cercarán,
antes que me vaya... de estos tiempos que se respiran...
pero no me iré hasta honrar a Germania,
lugar por donde corrías...
luego el tiempo nos atropella,
para hacernos conscientes de que hay un fin para cada consigna,
lo demás,
es apenas lo demás,
y la huella estará borrada,
para cuando regresemos... 
a cumplir con la gracia extendida,
de nacernos en cercanía.
ABRIL 01, 2015.-

DEDICADO A: Julio Enrique Bellagamba, varón de humildades contenidas... de silencios prologados... de miradas siempre ganadas, jamás perdidas.